Irán ha despedido al antiguo jefe de inteligencia de la fuerza de la Guardia Revolucionaria, considerado una de las figuras más poderosas del país, a medida que aumentan las preocupaciones sobre la guerra encubierta de Israel contra los sistemas de defensa de Irán y su programa nuclear.
La destitución del jefe de inteligencia, Hossein Taeb, tras 13 años en el cargo, fue confirmada en un comunicado de la Guardia que no explicó por qué había sido destituido. Pero los analistas estuvieron de acuerdo en que su fracaso para evitar que Israel violara la red de seguridad de Irán estaba en el centro de todo.
“No logró detener la infiltración de Israel y no tuvo mucho éxito en las operaciones de represalia fuera de las fronteras”, dijo Seyed Peyman Taheri, analista cercano al gobierno de Irán. “Su remoción es para traer sangre nueva y tener ambas cosas bajo control”.
Israel e Irán han estado atrapados durante años en una guerra en la sombra: una serie de operaciones encubiertas que abarcan tierra, mar, aire y ciberespacio. Pero recientemente, Israel intensificó sus ataques y amplió los objetivos más allá de las personas involucradas en el programa nuclear. También ha lanzado una serie de ataques con aviones no tripulados en las profundidades de Irán.
El primer ministro de Israel, Naftali Bennett, admitió haber encubierto operaciones israelíes contra la Guardia Revolucionaria en una entrevista final con The Times el lunes, y dijo que cuando los iraníes “nos atacan a través de representantes o directamente, pagarán un precio”. Describió su llamada “doctrina del pulpo” de golpear a Teherán en su cabeza en lugar de sus tentáculos.
“Resulta que estos tipos son más vulnerables de lo que parecen”, dijo. “El régimen iraní está podrido, corrupto e incompetente”.
El Sr. Taeb, que es un clérigo chiíta, fue reemplazado por el general Mohammad Kazemi, un alto miembro de la Guardia que ha sido el jefe de la unidad de Protección de Información de la Guardia Revolucionaria, que supervisa todas las operaciones de la fuerza.
El Sr. Taeb, a quien se consideraba casi tan poderoso como el líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, en su papel: la mera mención de su nombre inspiraba miedo porque ordenó medidas enérgicas contra la disidencia, ejecuciones, arrestos y varias operaciones de inteligencia.
La remoción del Sr. Taeb probablemente conducirá a una reorganización importante de la unidad de inteligencia de la Guardia, con un enfoque en encontrar a los espías de Israel y limpiar la casa, según expertos dentro de Irán.
Apenas unos días antes del despido del Sr. Taeb, los medios de comunicación israelíes lo acusaron de respaldar el complot para atacar a los turistas israelíes en Turquía. Turquía detuvo a cinco iraníes en Estambul el miércoles, sospechosos de estar involucrados en un supuesto complot para matar a turistas israelíes en el país.
El presidente Donald J. Trump designó a la Guardia Revolucionaria como grupo terrorista extranjero en 2019 y le impuso sanciones. Era la primera vez que el gobierno de los Estados Unidos incluía en la lista negra a una parte del ejército de un país como organización terrorista.
Desde entonces, la decisión ha estancado las negociaciones con Irán para revivir el acuerdo nuclear de 2015. Irán ha dicho que no volverá a la mesa hasta que se elimine la designación, pero la administración Biden se ha negado.
La declaración de la Guardia Revolucionaria decía que el Sr. Taeb fue designado como asesor del comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria, el mayor general Hossein Salami, un puesto de rango mucho menor. Elogió sus años de servicio como jefe de inteligencia y, antes de eso, como jefe de la unidad paramilitar Basij, una división de la Guardia que opera como su brazo interno para reprimir la disidencia.
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