Con un adiós a los pañuelos con los que cubría la cabeza en muchas de sus apariciones públicas y junto a su hija. Así le ha dado la bienvenida a su nueva imagen Jada Pinkett Smith, que este lunes publicó una fotografía en su cuenta de Instagram con la cabeza completamente rapada. “Willow [su hija] me ha hecho hacerlo porque era hora de dejarlo ir, pero mis 50 están a punto de ser divinamente iluminados con esta cubierta”, ha escrito la actriz sobre el hecho de haberse despojado de su cabello. Una imagen que ha sido comentada por su hija pequeña. “Estás divina”, le ha contestado Willow Smith. En realidad, fue Willow la primera en compartir la imagen, después reutilizada por su madre, con un mensaje que reflejaba la unión entre ambas: “Un regalo es puro cuando se da de corazón a la persona adecuada en el momento y lugar adecuados, y cuando no esperamos nada a cambio”.
Acostumbrada a lucir el pelo muy corto, en 2018, la mujer de Will Smith desveló en el programa de entrevistas que conduce en Facebook, Red Table Talk, que estaba sufriendo una pérdida de cabello muy importante. “No es fácil, pero voy a hablar de eso”, dijo entonces, al tiempo que confesaba cómo durante la ducha se le caían puñados de cabello. Un problema capilar cuya causa afirmó desconocer, a pesar de haber consultado a especialistas y de haberse sometido a pruebas médicas. “Cuidar mi cabello ha sido un hermoso ritual, al igual que tener la opción de tener cabello o no”, aseguró entonces.
La conexión entre Jada y Willow ha sido evidente en múltiples ocasiones. Recientemente, la intérprete desvelaba que ambas habían decidido hacerse un tatuaje a juego, una flor de loto que representa la iluminación espiritual y sus propias experiencias superando las adversidades. Hace apenas unos días, también en su espacio en Facebook, Pinkett Smith se definía como “un milagro andante”, después de confesar que beber vino para ella era “como beber agua” y que mezclaba esta bebida con éxtasis y marihuana. “Me acostumbré a lo fuerte. Bebí mucho alcohol en el instituto, y cuando salí de él, pasé a mezclarlo todo. Así que éxtasis, alcohol, marihuana… Déjame decirte que me lo estaba pasando bastante bien”, relató, ante su madre, Adrienne Banfield-Joes, que presenta el programa junto a ella.
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