Tiene 52 años, pero parece haber hecho un pacto con el diablo. Y es que, pasado el cuarto de siglo, Jennifer López está aún más impresionante (si es que eso es posible) que a sus 20. Y la mejor prueba de ello es su último posado en bikini, con el que ha colapsado por completo las redes.
Resulta que la artista del Bronx (Nueva York) es la nueva imagen de la firma de ropa de baño ‘Virgin Voyages’ y ha querido compartir en su cuenta de Instagram un adelanto de lo que fue la sesión de fotos: “Modo verano: activado. Detrás de las cámaras”, ha escrito la cantante junto a las imágenes.
Y, como era de esperar, la publicación se llenó de ‘likes’ y comentarios en apenas unos instantes. Todos ellos coincidían en lo mismo: el espectacular estado de forma de Jennifer a su edad: “¿Cómo puede estar así de impresionante”, “Eres una diosa” o “Ojalá llegar así a su edad…”, son algunos de los mensajes que se pueden leer en el tablón.
Arduas rutinas de entrenamiento
Todo esto no es solo el resultado de una buena genética. Sino, también de largas y duras sesiones de entrenamiento. La neoyorquina trabaja entre cuatro y cinco días por semana rutinas ‘full body’, prestando especial atención a la zona del abdomen. De hecho, hace unos 200 abdominales al día.