MIAMI, Florida – Una consultora de inmigración de Miami enfrenta cargos federales luego que las autoridades la acusaron de ayudar a hombres extranjeros a obtener la residencia en Estados Unidos arreglando matrimonios falsos con mujeres cubanas residentes en el sur de la Florida.
Yamira Sánchez, de 47 años, está acusada de un cargo de conspirar para cometer matrimonio fraudulento y cinco cargos de alentar ilegalmente a un extranjero a residir en Estados Unidos, informó el viernes la Oficina de la Fiscalía Federal en el Distrito Sur de la Florida.
La fiscalía dijo que Sánchez es la dueña de Immigration Consultant and Immigration Corp., una compañía del sur de la Florida que ofrecía solicitudes de inmigración y otros servicios al público.
Sánchez arreglaba los matrimonios fraudulentos entre hombres italianos sin estatus migratorios en Estados Unidos y mujeres que habían nacido en Cuba, emigraron a Estados Unidos y obtuvieron estatus legal como ciudadanas o residentes permanentes, dijeron los fiscales en el documento de acusación dado a conocer esta semana.
Debido a que las mujeres habían nacido en Cuba, la Ley de Ajuste Cubano les permitía solicitar beneficios migratorios expeditos para sus esposos extranjeros, en la forma de residencia permanente inmediata en la mayoría de los casos, señalaron las autoridades.
Los hombres pagaban miles de dólares para casarse con una de las mujeres reclutadas por Sánchez y otras personas, lo que les permitía residir y trabajar legalmente en Estados Unidos, agregaron.
De acuerdo con el documento de la fiscalía, Sánchez, a través de su compañía, preparaba, notarizaba y presentaba los documentos de matrimonio e inmigración necesarios para que los hombres obtuvieron los beneficios migratorios.
Estos errores pueden causar la pérdida de la nacionalidad estadounidense.
Además de Sánchez están acusados los italianos Gennaro di Tommaso (32), Massimillano di Napoli (47), Fernando Sivo (25), Alessio Sarno (31) y Vincenzo Lopopolo (34), así como las cubanas Yaneisi Osorio Rodríguez (35), Emily Pérez (30), Jaileen Domínguez (23), Elizabeth Peñalver (29) y Loi Torriente (29).
Los acusados comparecieron ante una corte federal esta semana y salieron libres bajo fianza.
En caso de ser hallada culpable, Sánchez enfrenta una pena de hasta 10 años de cárcel y una multa de hasta $250,000.
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