Desde siempre, las hermanas, Esther y Alicia Koplowitz han llevado por bandera la discreción, centrándose en sus negocios y alejadas del ojo público, confirmando así que prefieren relegar a un segundo plano todo lo relacionado con su vida personal. Por eso, el hermetismo que han ido forjando con el paso de los años ha hecho que poco o nada se sepa sobre su esfera íntima. Sin embargo, ha trascendido en los últimos días un asunto que las afecta de manera directa. Después de tres años de batalla legal, el caso de su ‘hermano secreto’ ha quedado, finalmente, resuelto para las empresarias.
Esther Alcocer Koplowitz en la recepción del 12 de octubre. / Gtres
El Tribunal Supremo ha desestimado la demanda de Ramón Ignacio García, que reclamaba parte de la herencia de las hijas de Ernesto Koplowitz Sternberg y de Esther Romero de Juseu y Armenteros, asegurando ser hijo biológico de ella. El demandante, natural de Madrid, aseguraba que después de indagar sobre su pasado y su historia familiar había datos que no le terminaban de encajar. En ese proceso se habría enterado de que fue entregado a una casa de acogida cuando nació. Posteriormente habría descubierto el dato de que su madre biológica era la misma que la de sus presuntas hermanas.
El caso ha quedado cerrado porque dicha reclamación ha sido desestimada por la Sala de lo Civil en un auto con fecha de 27 de septiembre. Asimismo, se podía augurar dicho final, ya que su demanda no aportaba prueba alguna de ADN que respaldara su identidad. Su reclamación ya fue desestimada en primera instancia, pero tras recurrir el demandante esta decisión, la Audiencia Provincial de Madrid ordenó que se admitiera a trámite.
Alicia Koplowitz durante la entrega de los Premios Nacionales de Investigación / Gtres
Por su parte, Alicia y Esther Koplowitz aceptaron someterse a un test de ADN, pese a que sus abogados ya aseguraban entonces que no había «la menor brizna de indicio» de que la madre su madre diera a luz a otro hijo antes que a ellas. Los resultados del examen fueron claros, ya que, según aseguró el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, «se puede excluir que don Ramón Ignacio García comparta línea materna con doña Esther y doña Alicia Koplowitz Romero de Juseu». Con esta información, la Audiencia Provincial de Madrid volvió a confirmar la sentencia del juzgado que había desestimado la demanda.
Alicia Koplowitz en una imagen de archivo/Gtres
Sin embargo, García recurrió a las últimas instancias y acudió al Tribunal Supremo, que, finalmente, ha vuelto a condenar en costas al demandante. El equipo legal de las hermanas Koplowitz ha asegurado a través de un comunicado que se estudiará «cualquier medida adicional para que no vuelva a suceder que se interpongan frente a ellas demandas tan dolorosas como absolutamente infundadas, ni que se prolonguen los consiguientes procesos, pese a la ausencia del más mínimo indicio probatorio», según publica Vanitatis. De esta manera, aquí acaba el periplo judicial del demandante respecto a la identidad de su madre biológica.
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