El vídeo comienza con el central, vestido únicamente con unos pantalones negros, andando descalzo y con una botella de esa bebida alcohólica en la mano. Se acerca a un armario de dónde saca una camisa azul, mientras se suceden varias imágenes de su espalda sin señales de tinta y una voz de fondo que dice: “Aquí viene, el jugador más joven de la selección española de los últimos 64 años”, en referencia a sus tempranos inicios. A los pocos segundos, se empieza a dibujar en la parte posterior de su cuello un corazón clavado por una espada con alas; en su omóplato izquierdo, el rostro de un león; y, en su brazo derecho, una corona. Poco a poco su cuerpo se asemeja más al verdadero: repleto de tatuajes con diferentes símbolos que hacen referencia a su trayectoria personal y profesional. “Está en todos nosotros saborear la diferencia. Sé el rey”, se lee al final del anuncio.
Tal como escribe la marca en su perfil de Twitter, “el camino de Sergio Ramos está escrito en tinta como uno de los grandes de su generación”. El propio futbolista ha escrito en su cuenta de Instagram que “quién pensaría que un chico de Camas, en Sevilla, tendría la oportunidad de ser más internacional con la selección”. A lo que ha añadido: “Llegar a lo más alto solo depende de ti”.
El central ya no tiene apenas hueco para más tatuajes. En los nudillos de la mano izquierda exhibe varios números —35, +90, 2 y 19— que hacen referencia a varios de sus logros: los números con los que jugó en el Sevilla, el número con el que debutó en la selección española y el minuto en el que marcó el gol con el que el Real Madrid ganó su décima Champions. En la misma mano también aparecen las fechas de nacimiento de los hijos que ha tenido con la presentadora Pilar Rubio: Sergio, de cinco años, Marco, de tres, y Alejandro, de uno. En sus brazos lleva las iniciales de sus padres, José María y Paqui, y en el izquierdo el día en que fichó por el club merengue, el 31 de agosto de 2005, uno de sus mayores sueños. Además, no dudó en tatuarse una copa en su gemelo izquierdo cuando España ganó su primer mundial. Pero su cuerpo no está solo dedicado a su trayectoria y a su familia, sino también a sus ídolos, por lo que también muestra un tatuaje con la silueta del cantante Michael Jackson.