Vuelven las dudas a la vida de Georgina Rodríguez. Como si de un salto atrás en el tiempo – de un año- se tratara, el futuro se vislumbra borroso para ella. Tanto es así que no puede garantizar dónde va a vivir de aquí a dos meses vista. La razón que explica este panorama tiene nombre y apellidos: Cristiano Ronaldo. Como ya sucediera el pasado verano, el futbolista portugués planea un cambio de equipo que pasa por abandonar el Manchester United. Una decisión crucial porque afecta de manera frontal no solo a su vida sino también a la de sus seres queridos. ¿Nueva mudanza?
Actualmente hay muy pocas certezas que puedan desequilibrar la balanza para un lado o para otro. Todo arranca después de las espectaculares vacaciones de las que han disfrutado en Ibiza durante varias semanas. Ambos han estado disfrutando de las templadas aguas mediterráneas a bordo de un flamante yate valorado en más de 5 millones de euros. Sol, buceo, familia y amigos han sido los cuatro pilares clave que han marcado sus días de asueto.
Las dudas han comenzado cuando llegó el momento de volver a la fría Manchester. Cristiano Ronaldo debía incorporarse a los entrenamientos de pretemporada con el club el pasado 4 de julio, pero desde ese momento y hasta que se escribe este artículo, ha causado baja. Ni rastro de él por la ciudad deportiva. El portugués alegó «motivos familiares» para ausentarse pero ni Georgina ni él han dado pistas sobre cuáles son esos problemas que le impiden retornar al trabajo, si bien el club los ha dado por válidos. De momento. Pero en Inglaterra tienen claro que CR7 quiere rescindir su contrato este mismo verano porque considera que no cumple con sus ambiciosas expectativas. No acudir a la pretemporada es una medida de presión para que le dejen salir, pero de momento los dirigentes y el entrenador, Erik Ten Hag, se remiten al año de vinculación que le queda.
Es en este punto donde entra en juego la familia. A diferencia del verano pasado, cuando el gran objetivo era volver a Reino Unido, este año Cristiano tiene cerradas las puertas de casi la mayoría de los grandes clubes, que son a los que aspira. Eso genera una situación de incertidumbre para ellos, que acostumbran a no echar raíces en ningún sitio desde que salieran de Madrid. Lo más cerca que estuvieron de hacerlo fue en Turín (Italia), durante dos años. París, Múnich o Londres son algunas de las ciudades donde podrían recalar si se acaba marchando, aunque no se puede descartar ningún escenario, ni siquiera quedarse tal y donde están.
Un verano agridulce para Georgina
Este atolladero ha llegado tras las semanas de vacaciones, más necesarias que nunca, quizá. Está siendo un año delicado en lo personal y sobre todo de contrastes. En primer lugar, el 2022 será inolvidable por el nacimiento de Bella Esmeralda, el segundo hijo en común para ambos tras Alana Martina, y que se une a Cristiano JR y los mellizos Eva y Mateo. Pero es inevitable olvidar el amargo trago que supuso el fallecimiento de su hermano durante el parto. Georgina Rodríguez tiene ante sí un posible golpe de timón para su vida, otro más.
Por si fueran pocos ingredientes en la coctelera, Look ha desvelado en exclusiva el enésimo feo de la familia de Cristiano hacia la española. El detonante nace de la Madeira Fashion Designers. Un evento cuya madrina es Elma Aveiro, hermana mayor del luso, quien se ha decantado por la presentadora y DJ portuguesa, Merche Romero, conocida por ser la primera novia del delantero. Hay que recordar que es la hermana con la que Georgina menos se lleva.