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La llamativa razón por la que el asfalto de las carreteras es negro

Aunque es un elemento que no siempre se tiene en consideración, diferentes estudios han demostrado que los colores pueden influir en gran medida en la conducta del ser humano. En el caso de las carreteras, el hecho de que el pavimento sea de color negro no es un hecho al azar, sino que tiene su razón de ser.

El hormigón asfáltico es un material compuesto que se utiliza para la pavimentación de carreteras. Está formado por áridos, como arena y piedra triturado, y relleno con asfalto de petróleo. Tiene excelentes propiedades como impermeabilizante, y esta es una de las razones por las que el asfalto de las carreteras es de color negro.

La gran mayoría de carreteras que existen en el mundo son negras por un motivo muy simple: el material para su construcción, el hormigón asfáltico, es de este color. Cuando hace sol, absorben entre un 80% y un 90% de la radiación, convirtiéndose así en una fuente de color y generando problemas medioambientales.

Carreteras de color blanco

Desde hace cuatro años, en la ciudad de Los Ángeles se están pintando las carreteras de color blanco, el cual refleja los rayos solares. Se trata de un proceso muy sencillo. Los camiones rocían un revestimiento blanco grisáceo bautizado con el nombre de CoolSeal por el pavimento, y la sustancia se extiende para que quede repartida de forma homogénea.

Según ha informado la cadena local ‘CBS Los Ángeles’, la medida está dando muy buenos resultados. En las calles donde las carreteras se han pintado de blanco la temperatura se ha reducido entre 5 y 8 grados centígrados.

Una de las cuestiones que se plantean los conductores es la de si el pavimento, al ser de color blanco, no deslumbra en los días soleados. Pues bien, lo cierto es que no, porque cuando se seca, adquiere un tono grisáceo.

Madrid

Madrid es una ciudad donde se producen islas de calor en los meses de verano. Se trata de un fenómeno por el cual la temperatura del centro es más alta que la de la periferia. Las carreteras, aceras y edificios acumulan una gran cantidad de calor por el día y lo liberan por la noche.

Se ha planteado la posibilidad de pintar las carreteras de blanco como en Los Ángeles para reducir la temperatura. Sin embargo, el precio es muy elevado: 22.000 euros por kilómetro. Por lo tanto, la suma de pintar los seis kilómetros del Paseo de la Castellana ascendería a 145.000 euros.




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