El diputado Alfonso Ramírez Cuéllar, vicecoordinador de Morena en la Cámara de Diputados, afirmó, en entrevista para Aristegui en Vivo, que con la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia de la República, su partido y aliados buscarán consolidar las reformas impulsadas por el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
El morenista hizo un recuento de las que se han aprobado y las que están pendientes en el actual periodo legislativo y destacó que en el Congreso se ha logrado concluir cuatro reformas significativas.
La primera, la del Poder Judicial que reiteró, tiene como objetivo mejorar la eficiencia del sistema de justicia. La segunda, sobre la Guardia Nacional, sobre la que dijo se enfocó en fortalecer su estructura y funcionamiento para reforzar la seguridad pública, y la tercera reforma se centró en la protección de los derechos de los pueblos indígenas y afromexicanos, asegurando su inclusión y participación en las políticas públicas.
Recordó que hubo modificaciones al artículo 123 constitucional, particularmente en materia laboral, para garantizar mejores condiciones de trabajo; sin embargo, el diputado subrayó que aún hay temas pendientes, en particular las leyes secundarias, necesarias para concretar las reformas aprobadas.
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Resaltó, en materia de Guardia Nacional, que un punto relevante es regular la actuación de las Fuerzas Armadas en tiempos de paz.
“Tenemos que definir claramente cómo estarán operando las Fuerzas Armadas en apoyo a la Guardia Nacional y qué límites tendrán en su actuación en tiempos de paz”, recalcó.
Ramírez Cuéllar adelantó que la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales y el incremento del salario mínimo son reformas en proceso de discusión, pero que requieren ajustes y consenso para su aprobación.
“La jornada de trabajo tiene que cambiar, estamos viendo cómo hacer esa transición sin afectar la productividad ni los derechos de los trabajadores”, dijo el diputado.
También, dijo que uno de los temas más urgentes en la agenda legislativa es la reforma en materia de agua, que busca regular el uso y distribución de este recurso.
Recordó que la administración de Carlos Salinas de Gortari “dejó un desorden en la política de concesiones de agua” que sigue afectando al país.
“El reto es garantizar el acceso al agua como un derecho humano, no solo en términos de cantidad, sino también de calidad. El agua es un bien nacional que debe ser gestionado con responsabilidad”, afirmó.
La reforma pretende no solo garantizar el suministro adecuado a los hogares, sino también revisar y reorganizar las concesiones para riego agrícola y el uso de los organismos operadores.
El diputado también abordó la política energética, señalando que uno de los principales objetivos de la actual presidenta, Claudia Sheinbaum será fortalecer las redes eléctricas del país, ya que actualmente existen grandes déficits que obstaculizan el desarrollo económico.
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Según Ramírez Cuéllar, la llamada Cuarta Transformación busca consolidar un mercado eléctrico que garantice que el 54% de la generación de energía eléctrica siga en manos de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Esto es clave, dijo el legislador, para avanzar hacia una transición energética que promueva el uso de energías limpias y que asegure un suministro eléctrico estable y sostenible para el país.
En cuanto a la política económica, Ramírez Cuéllar destacó que el nuevo gobierno pondrá un fuerte énfasis en el desarrollo de infraestructura y la creación de empleos mediante la relocalización de industrias o “nearshoring“, que ya está trayendo importantes inversiones extranjeras a México.
Además, explicó, se implementará una nueva política de vivienda que aprovechará los recursos disponibles en instituciones como Infonavit y Fovissste para atender la demanda de vivienda de la población.
“El objetivo es mejorar la calidad de vida de la gente, impulsando una oferta de vivienda digna y accesible, al mismo tiempo que se promueve el crecimiento económico en todo el país”, comentó.
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También, Ramírez Cuéllar reflexionó sobre el papel de la mayoría de Morena en el Congreso y se dijo a favor de fortalecer los derechos de las minorías y mejorar el funcionamiento de las comisiones legislativas, los centros de investigación y los medios de comunicación del Congreso.
“El Congreso debe ser un espacio de deliberación abierto y democrático, donde todas las voces sean escuchadas y donde las decisiones se tomen de manera consensuada”, subrayó.
Además, destacó que la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia representa el comienzo de una nueva etapa en México, donde el objetivo principal es construir un “nuevo contrato social”.
Según el legislador, este debate debe centrarse en cómo avanzar en las reformas necesarias para continuar con la transformación iniciada en diciembre de 2018, bajo el liderazgo del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
“Siento que la llegada de Claudia abre una nueva etapa, estamos por construir un nuevo contrato social, creo que el debate debe estar encaminado en este sentido”, expresó Ramírez Cuéllar.
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Señaló que el enfoque principal debe ser la consolidación de una red de bienestar que se ha venido fortaleciendo durante los últimos seis años.
“Lo más importante es continuar con esta decisión que se tomó desde diciembre de 2018 con la llegada del presidente López Obrador para fortalecer una red de bienestar que tiene como ingrediente básico los ingresos de los hogares mexicanos, producto del trabajo”, puntualizó.
Asimismo, el legislador hizo un llamado a abrir un diálogo nacional para definir las reformas que México necesita en esta nueva etapa.
“Lo que necesitamos es ver cuáles son los cambios que deben de venir”, indicó Ramírez Cuéllar.
En su opinión, uno de los temas principales es la importancia de las minorías parlamentarias y el fortalecimiento del Congreso en su relación con la sociedad mexicana.
“Hay que abrir una conversación nacional. Cuando yo fui diputado la primera ocasión, diputado federal, el PRI perdía la mayoría. Hicimos una verdadera revolución con Pablo Gómez, con Porfirio Muñoz Ledo en el Congreso, en el 97, y creo que el Congreso adquirió una relevancia, una importancia, una democratización institucional”, recordó.
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Otro de los temas que abordó, Ramírez Cuellar fueron los retos que enfrenta el país respecto a la concentración de mercados y la competencia económica.
“El gran debate nacional es decir: este país necesita una política antimonopólica muy fuerte. Los niveles de concentración y control de los mercados, es inaceptable, el daño al consumidor ya es inmenso”, comentó, e hizo referencia a sectores como las telecomunicaciones, el cemento, el ferrocarril, los productos farmacéuticos, el sector bancario y financiero.
En cuanto a los órganos autónomos, sugirió que el enfoque no debe centrarse exclusivamente en su estatus jurídico, sino en cómo mejorar las políticas de competencia.
“Más que enfrascarnos en decir si se quita la autonomía o no, lo primero es llegar a un acuerdo nacional para ver cómo fortalecemos la política de competencia en el país”, explicó.
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En ese sentido, mencionó al INAI y su desempeño en la protección de datos personales, indicando que este órgano ha quedado rebasado en sus funciones, por lo que dijo, es necesaria una revisión de la política de protección de datos personales en el país, sugiriendo la creación de un nuevo organismo más robusto y especializado.
“El INAI ha quedado rebasado en cuanto a la protección de datos personales. Los niveles de criminalidad, de hostigamiento, de fragilidad en la protección de datos personales nos tienen que llevar a definir una estrategia distinta”, expresó el diputado.
Finalmente, destacó que con la llegada de Claudia Sheinbaum se ha abierto la posibilidad de una nueva política de fomento a la economía, que incluye una reconstrucción de las políticas industrial, agrícola y comercial.
“Hay una mayoría que se tiene que ejercer, y hay una determinación de la nueva presidenta de gobernar para todos, y habría una gran conversación nacional”, concluyó.
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