El Parlamento catalán también actuará judicialmente contra el caso de ciberespionaje del que fueron víctimas el presidente de la Cámara, Roger Torrent, y el exconsejero de Acción Exterior y diputado, Ernest Maragall. La Mesa del Parlament ha dado luz verde este martes al texto de una denuncia por el hackeo de los móviles de ambos líderes republicanos, un escándalo publicado por El PAÍS y The Guardian. Solo Ciudadanos se ha abstenido en la votación, el resto de las formaciones han dado su visto bueno.
Hace una semana, la Mesa había autorizado redactar el texto de la denuncia, que ahora ha sido refrendado. Según el documento, tanto Torrent como Maragall sufrieron “una intrusión ilegítima” en sus teléfonos y eso “vulneró su intimidad”, lo que puede constituir un delito previsto en el artículo 197 del Código Penal.
Entre mayo y abril de 2019, los móviles de ambos dirigentes republicanos sufrieron un ataque informático mediante un software espía que solo puede ser adquirido por Gobiernos, ya que busca poder seguir actividades terroristas, en entre otros temas. Ese programa se llama Pegasus y ha sido utilizado por los servicios de inteligencia españoles. Torrent y Maragall desde un principio consideran que el Estado español está detrás del ciberespionaje.
Torrent también anunció la presentación “en breve” de una querella a nombre personal y contra el exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Félix Sanz. Esto aún no ha sucedido.
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