Hay gente que lleva las bromas al extremo máximo, e incluso fingen su propia muerte. Ha ocurrido en Bosnia y Herzegovina, donde el directivo de la empresa de informática NSoft ha saltado por la venta tras hablar con sus empleados. Igor Krezic reunió a toda la plantilla para agradecer a todos el buen resultado de la empresa. Tras unas palabras, dejó el micrófono y se acercó al balcón, para sacar el grito de sorpresa de los presentes.
https://www.youtube.com/watch?v=5YWAD82g2_U
En cuanto vieron sus intenciones, muchos se fueron acercando para evitarlo, mientras otros le gritaban. Cuando se desploma al vacío, hay reacciones de todo tipo. Desde los que se caen de espaldas al haber presenciado la supuesta muerte del jefe, hasta los que bajan las escaleras para tratar de ayudarle. Quienes primero se acercan a la ventana descubren la realidad, con alguna carcajada cuando descubren que todo ha sido una broma.
El sueño oculto de muchos trabajadores es acabar con tu jefe, pero está claro que cuando ocurre, y delante de tus ojos, dejas de lado ese sentimiento de odio.
¿Dónde está el límite de una broma?
https://www.youtube.com/watch?v=KFNAfeY4dXA
Internet se ha convertido en la mejor pantalla para demostrar al mundo las cosas que se nos ocurren. El mundo de las bromas ha experimentado un crecimiento desmesurado. El problema está en las personas que sobrepasan el límite del humor. En España hemos tenido el conocido caso del “caranchoa”, que terminó resolviéndose en un juicio. O también el del youtuber que dio galletas con pasta de dientes a un mendigo.
La búsqueda del viral ha hecho que las bromas sean de todo tipo. Que se hagan a desconocidos de la calle o entre parejas, todo por el ansia de las visitas. Aunque intenet no ha sido el motor que ha explotado este género. La televisión cuenta con programas en todo el mundo sobre bromas. Y es que, aunque cueste reconocerlo, parece que disfrutamos con el sufrimiento ajeno.
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