Ícono del sitio La Neta Neta

La primavera llega con tiempo de invierno: hasta -10° y nieve a 500 metros


La primavera astronómica comenzará el sábado 20 de marzo y lo hará con una regresión al invierno en toda regla. Aunque la primera mitad de la semana será estable y soleada, a partir del jueves se producirá un cambio brusco del tiempo en la Península y Baleares, con un desplome de las temperaturas, sobre todo en la mitad norte, y con nevadas en cotas “inusualmente bajas”, detalla Rubén del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). De momento, no se puede determinar con precisión qué zonas se verán más afectadas por la nieve, pero “lo que parece claro es que no llega otra Filomena”, despeja los fantasmas Del Campo. Canarias quedará al margen de esta situación, que comenzará a remitir a partir del lunes 22.

Hasta el miércoles predominará el anticiclón, es decir, sol y ausencia de precipitaciones. Sin embargo, envía vientos del norte que acumulan nubes en Pirineos y el Cantábrico, donde se esperan lloviznas y lluvias débiles. Habrá nevadas, “no muy copiosas”, en Pirineos a partir de 1.000 a 1.300 metros, una cota que bajará a 700 a última hora del miércoles. También pueden registrarse chubascos en los litorales de Cataluña, Comunidad Valenciana y Baleares. Las temperaturas serán propias para la época, con las diurnas “un poquito altas en puntos del norte”.

El jueves, una masa de aire muy frío, procedente del continente europeo, comenzará a invadir la Península, acompañada por una borrasca “con movimiento retrógrado”, lo que quiere decir que su ruta no es la más “habitual”, ya que “se moverá hacia el suroeste cuando lo más normal es que vayan desde el Atlántico hacia el continente europeo”. Este desplazamiento añade “dificultad a la hora de predecir su posición exacta y por lo tanto, la incertidumbre es más alta que de costumbre”.

A día de hoy, parece “bastante probable” que las temperaturas bajarán de forma “importante” el jueves en el sureste peninsular, área mediterránea y Baleares y que el descenso continuaría el viernes en la mayor parte de la Península, sobre todo en la mitad norte. Así, las máximas estarán desde el viernes entre 5º y 10º por debajo de la media de la época. El sábado, el día más frío del episodio, llegarán a estar entre 10º y 15º por debajo de lo habitual en puntos de la mitad norte. Los termómetros comenzarán a recuperarse el domingo, pero aún seguirá el ambiente “muy frío”.

Las heladas nocturnas serán “frecuentes” desde el jueves y el viernes afectarán a Castilla y León, Castilla-La Mancha y Aragón, así como a zonas de montaña. El sábado y el domingo ya afectarán a buena parte del interior y alcanzarán cierta intensidad para la época del año. “Bajaremos de los -2º en la meseta sur; de -5º en la meseta norte y páramos del centro y de -10º en zonas de montaña. Son valores nocturnos entre cinco y diez grados por debajo de lo habitual”, puntualiza el meteorólogo.

El viento, que soplará con intensidad en zonas de montaña, Valle del Ebro y otros puntos del nordeste peninsular y Baleares, aumentará la sensación de frío. Y queda un tercer actor: las precipitaciones. El jueves serán más probables en el tercio norte, regiones mediterráneas y Baleares y serán en forma de nieve a partir de 600 metros en el norte peninsular.

El viernes las precipitaciones afectarán al tercio norte de la Península, a la meseta norte, en torno de los sistemas Central e Ibérico y a otros puntos del sureste peninsular, y serán en forma de nieve en muchas de estas zonas, puesto que la cota estará muy baja, por debajo de los 500 metros. Es posible que nieve en algunas capitales como Burgos, León, Soria y Valladolid. La probabilidad es menor en Ávila, Cuenca, Guadalajara, Segovia y Teruel. El sábado y el domingo continuarán las precipitaciones con nieve en cotas bajas, aunque ya con menor intensidad y con una progresiva estabilización a partir del domingo.


Source link
Salir de la versión móvil