Todos cuando vamos al supermercado a comprar leche podemos comprobar como esta, se encuentra generalmente en las estanterías y no dentro de las neveras. Puede que sí que en algunos establecimientos, veamos botellas de leche en nevera, pero la mayoría de leche hoy en día ocupa estantes y se vende a temperatura ambiente, pero ¿cuál es el motivo? La razón tiene que ver con el tipo de leche ya que la de nevera es leche fresca con un consumo bastante limitado, mientras que la ves en brick o botella a temperatura ambiente durará más tiempo. ¿Pero no se podría vender esta leche también en la nevera?.
Por qué hay leche que se vende fuera de la nevera
La mayoría de gente hoy en día suele comprar la leche que se vende en los supermercados a temperatura ambiente. Leche que se conoce como UHT y que frente a la leche fresca tiene como ya hemos mencionado una mayor duración gracias a un proceso al que es sometida que además implica que no necesite nevera (siempre y cuando esté cerrada).
En concreto, la leche UHT que es también conocida en otros países como leche aséptica, logra su largo periodo de conservación gracias a que se somete a un proceso de ultrapasteurización, es decir, que se hierve a altas temperaturas (150 grados). De este modo se elimina cualquier organismo que pudiera afectar a la leche sin la necesidad de tener que almacenarla en la nevera, sino que podemos guardarla en la despensa durante varias semanas e incluso meses. Eso sí, una vez abierta se debe conservar en la nevera, pero aún así sigue durando más que la leche fresca cuya fecha de caducidad suele ser de apenas dos o tres días.
Además, la leche UHT es más fácil de transportar que la leche fresca porque no requiere camiones frigoríficos ni salas de almacenamiento, lo que también significa que tiene una huella de carbono menor que otras leches gracias a su menor consumo de energía.
Por otro lado, no debemos confundir la leche fresca con leche cruda. La leche que proviene directamente de una vaca sin procesamiento es la conocida como leche cruda , que generalmente se considera insegura para beber porque puede contaminarse fácilmente con bacterias como E. coli o Salmonella . Aunque no es ilegal vender leche cruda en España, su venta pasa por bastantes controles y suele hacerse a pequeña escala y desde granjas dedicadas a ello, de modo que la leche que todos compramos en el supermercado ha sido pasteurizada (que es la frescca) o ha sido ultrapasteurizada (leche UHT).
Por último (y de ahí ese nombre de aséptico), el envase de la leche UHT también se suele esterilizar con peróxido de hidrógeno, que luego se retira antes de su uso. La combinación de altas temperaturas y empaque estéril evita que el producto lácteo de baja acidez sea vulnerable a la infección bacteriana y con ello que podamos disponer de leche por más tiempo dado que el sabor tampoco difiere mucho al que tiene la leche fresca.
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