La Real va a dirimir 11 meses de competición en 90 minutos de partido a 32 grados en cancha del Atlético de Madrid, uno de los cocos del campeonato y de Europa. Tras 37 partidos, 34 de ellos en puestos continentales, los de Imanol se lo juegan todo en la última cita, contra un equipo de Simeone que cumplió su objetivo de clasificarse para la Champions League, pero que quiere ser tercero por detrás de Real Madrid y Barcelona. La estadística, la pura matemática que no atiende al potencial de los rivales ni a estados de ánimo y cansancio, establece que la Real, sexta en la tabla, tiene un 86% de clasificarse para Europa, entre el quinto y el séptimo. Pero la realidad es que se enfrenta al enemigo más duro, de entre sus rivales directos, en un lugar donde suma seis derrotas consecutivas y muy pocos puntúan y una derrota tiene muchas trazas de dejarle sin el premio.
La Real depende de sí misma y valen dos de los tres resultados posibles en su partido. Si gana, se asegura ser quinta o sexta y clasificarse para la fase de grupos de la Europa League. Si empata, quedará sexta o séptima, con plaza continental garantizada, salvo en el caso de que el Granada golee por seis o más goles al Athletic. Si pierde, hay opciones, pero queda rezar.
Mucho peligro en caso de perder
En caso de derrota, la condena de quedarse sin Europa es muy probable. Tienen que darse dos de estas situaciones: que el Getafe no pierda en el campo del Levante, que el Granada le gane en casa al Athletic o que el Valencia derrote al Sevilla en el Pizjuán. Las dos primeras son muy factibles considerando que ni el equipo granota ni el bilbaíno se juegan nada. Los de Gaizka
Garitano sepultaron sus opciones perdiendo en casa ante el Leganés (0-2).
El Atlético de Madrid es un equipo extraordinariamente poderoso en su feudo, donde este curso presenta un balance de 12 victorias, 5 empates y sólo una derrota. Sólo pudo ganarle el Barcelona con gol de Messi en el 86’. Es el tercer mejor conjunto en su feudo (41 puntos) tras el Barcelona (50) y el Real Madrid (49) y el segundo mejor en general tras el confinamiento. Los datos asustan: ha ganado siete encuentros y empatado tres. Ha salido victorioso en sus cuatro citas en su feudo (1-0 al Valladolid, 2-1 al Alavés, 3-0 al Mallorca y 1-0 al Betis) , en las que sólo ha encajado un gol.
El cálculo de probabilidades y la trayectoria durante toda la presente temporada son favorables a la Real. Los txuri urdin tienen un 11% de opciones de ser quintos, un 49% de ser sextos, un 26% de ser séptimos y un 14% de quedarse fuera de Europa. El empate en el Wanda vale tanto al Atlético como a la Real para lograr sus objetivos, pero, salvo que las circunstancias del partido lo requieran, no parece previsible un ‘biscotto’ previo entre los contendientes.
La Real no quiere morir en la orilla. Ha estado tumbada en la hamaca de los puestos europeos de la clasificación tras 34 de las 37 encuentros disputados. Sólo estuvo alejada de los siete primeros después de las jornadas 1, 3 y 22. Ahora suma 15 jornadas consecutivas entre la tercera y la séptima plaza. Que le arrebaten su tesoro en la última estación liguera sería extremadamente cruel.