La vida de Alessandro Lequio ha dado un giro de 180 grados en menos de tres años. El italiano ha tenido que hacer frente, sin opción alguna, al que será el capítulo más doloroso de su vida: la muerte de su hijo, Aless Lequio. El joven emprendedor falleció aquel 13 de mayo de 2020 a consecuencia del cáncer que padecía, el sarcoma de Ewing. Después de diagnosticarle la enfermedad cogieron un vuelo, su madre, Ana Obregón, su padre y él. Se curo, pero tuvo una terrible recaída que no pudo superar.
Han pasado tan solo unos días, desde que Ana Obregón presentara a los medios de comunicación El chico de las musarañas, libro que comenzó a escribir el joven emprendedor antes de morir y que, finalmente, terminó su madre. El hotel Westin Palace de Madrid se convirtió en el escenario donde la también bióloga respondió a varias cuestiones tras meses en Miami, Estados Unidos, con motivo del nacimiento de su nieta, Ana Sandra, nacida mediante gestación subrogada a través de la genética de Aless. Un movimiento que realizó al ser uno de los últimos deseos de su hijo, tal y como ella misma ha asegurado en distintas entrevistas.
Rueda de prensa en la que Ana confesó los momentos que vivió junto a su hijo y que ha plasmado en ese libro cuyo dinero íntegro va destinado a la Fundación Aless Lequio. Tras esto, el colaborador de El programa de Ana Rosa ha compartido un post en el que aparece como protagonista su hijo durante el tratamiento contra en cáncer en la ciudad de los rascacielos. «Nueva York. Mayo 2018. Aless y ena #lequiocity», ha escrito en la publicación.
Ana pasó todo el tiempo junto a su hijo, en su incansable lucha contra esta enfermedad. Por su parte, Alessandro vivió entre Madrid y Nueva York el tiempo que duró el tratamiento para así poder atender sus compromisos profesionales. Desde siempre la complicidad entre padre e hijo ha quedado patente y pese a que Alessandro prefiere llevar en la más estricta intimidad su duelo, no hay día en el que no se acuerde de su hijo.
Después de la presentación del ejemplar, Alessandro estalló, algo que no suele ocurrir, pero el dolor de un padre al perder un hijo hizo que hiciera unas declaraciones de lo más dolorosas.
«Es lo único que voy a decir sobre el libro. Cada uno lleva las cosas como quiere o como puede… Me parece tremendo que la gente diga que esto es fantástico. Que un chico de 27 años se muera no tiene nada de fantástico. ¡Es una historia de terror! ¡Es una historia de terror, del terror de los terrores!», declaró, alterado y visiblemente afectado por la situación que está viviendo en los últimos tiempos.