A pocos días de que el Juez Segundo de Distrito, Rogelio Leal Mota, tome la decisión de retirar o no, la suspensión de actividades impuesta sobre la mega granja de la empresa Producción Alimentaria y Porcícola (PAPO), el colectivo Kanan Ts’ono’ot –Guardianes de los Cenotes– denunció que una de las defensoras de los cenotes de Homún recibió amenazas en su contra y en contra de sus hijos.
En un comunicado publicado este miércoles, el equipo del Grupo Indignación, Promoción y Defensa de los Derechos Humanos, que desde el inicio del proceso por la defensa del agua ha brindado acompañamiento a los pobladores de Homún, se sumó a las exigencias del colectivo Kanan Ts’ono’ot.
“Exigimos a las autoridades de los tres niveles que proporcionen las medidas necesarias para la protección de nuestra compañera, a quien le expresamos todo nuestro apoyo y solidaridad”.
Detallaron que los hechos ocurrieron el martes 5 de abril cuando cuando una de las guardianas de los cenotes de Homún recibió una llamada telefónica. Al responder, le pidieron informes sobre los recorridos turísticos del municipio; sin embargo, de forma sorpresiva le preguntaron sobre su labor como activista e inmediatamente le cuestionaron si no temía que “le pasara algo a sus hijos”.
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Foto: Especial
Los Guardianes de los Cenotes y Grupo Indignación señalaron que esta no es la primera vez en que se realizan acciones de intimidación y amenaza contra las personas que se han pronunciado abiertamente contra la operación de la mega granja de PAPO, del Grupo Porcícola Mexicano Kekén.
Por el contrario, aseguran que se han reportado repetidas acciones de intimidación contra defensores de derechos humanos de este pueblo maya. No obstante, resaltan que:
“En esta ocasión nos pone en especial alerta el hecho de que se esté amenazando a la infancia de Homún, la cual está en su legítimo derecho de defender el agua, los cenotes y su derecho a la libre determinación y a un ambiente sano”.
Desde septiembre de 2018, niñas y niños mayas promovieron un juicio de amparo en el que reclaman su derecho a un medio ambiente sano, su derecho al agua y su derecho como miembros de la comunidad de Homún en Yucatán, luego de no haber sido consultados respecto a la construcción y operación de una megagranja de cerdos en la zona.
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