Ícono del sitio La Neta Neta

Las maldiciones que acechan la boda de Tamara Falcó

La boda de Tamara Falcó está siendo un auténtico quebradero de cabeza tanto para ella como para su futuro marido, Íñigo Onieva. Hay que remontarse a septiembre de 2022, cuando anunciaron por primera vez su compromiso. Ninguna de las partes imaginaba lo que horas después de la publicación iba a suceder. Comenzaron a correr como la pólvora una serie de vídeos en los que aparecía el empresario besándose con otra mujer. Aunque en un primer momento negó la monumental poco de después confirmó a golpe de comunicado que esas informaciones eran ciertas.

Tamara Falcó e Iñigo Onieva en Madrid / Gtres

El relaciones públicas estuvo en el festival de música Burning Man, celebrado en Nevada, Estados Unidos, escenario donde ocurrió la deslealtad. Al enterarse Tamara de lo ocurrido puso distancia, pero en plenas navidades se obró el milagro durante la Misa de Gallo, ya que tuvieron una toma de contacto que le sucedieron otras tantas.

Decidieron irse al Polo Norte para poner en orden sus ideas y, de nuevo, Íñigo Onieva la pidió matrimonio. El enlace seguía en pie contra todo pronóstico. La ilusión y el amor pudieron unir a la que era y se ha vuelto a convertir en una de las parejas del momento.

Tamara Falcó e Íñigo Onieva en Madrid. / Gtres

Será el 8 de julio de este mismo año cuando se den el ‘sí, quiero’ en el palacio de El Rincón, situado en Aldea del Fresno, a las afueras de Madrid. Aunque está siendo una completa gincana llegar hasta el gran día. Y es que, poco antes de su despedida de soltera, que tuvo lugar en Fátima, tuvo una caída en El Hormiguero, espacio en el que colabora cada jueves. Sin embargo, ese esgince no empañó esos divertidos días con su grupo de amigas más cercano.

Tamara Falcó en una imagen de archivo / Gtres

Sin vestido de novia

El 16 de mayo es una fecha que Tamara Falcó no olvidará jamás porque fue el día en el que se quedó sin vestido de novia a escasas semanas de su boda. Fue la propia firma la que anunció en una misiva el fin del contrato que tenía con la marquesa de Griñón. Noticia que pilló por sorpresa a la hija de Isabel Preysler, dado que se enteró por los propios medios de comunicación.

«Lamentablemente, el acuerdo entre Sophie et Voilà y la señora Falcó para la confección de su vestido de novia ha tenido que ser resuelto como consecuencia del incumplimiento contractual por parte de la señora Falcó», comenzó diciendo la marca. Sin embargo, Sofía Arribas y Saioa Goitia, dueñas de la firma, no especifican cuál es, exactamente, el motivo de esta precipitada decisión. «Sentimos un profundo respeto por la creación artística de otros compañeros y nuestra ética empresarial nos impide traspasar ciertos límites que pondrían en peligro la autoría original del diseño», añadieron. «Por eso, y por el respeto que nos merece la originalidad de los trabajos de otras marcas de alta costura, no podemos cumplir con determinadas exigencias de la señora Falcó, que desde el inicio de la relación hemos desaconsejado y negado a realizar por acercarse demasiado a diseños ajenos a nuestra firma», puntualizaron.


Source link
Salir de la versión móvil