Singapur. – El restaurante Mirazur, situado en la riviera francesa y regentado por el argentino Mauro Colagreco, se convirtió en el mejor restaurante del mundo, en una clasificación con una importante presencia española y latinoamericana.
La influyente lista The World’s 50 Best Restaurants 2019, se reveló durante una gala en Singapur e incluyó un total de ocho restaurantes latinoamericanos entre los que destacó el peruano Central de Lima, del chef Virgilio Martínez, que repitió este año en el sexto puesto y se alzó como el Mejor Restaurante de Sudamérica.
El argentino Mauro Colagreco, que cuenta con tres estrellas Michelin, logró hacer historia por partida doble al convertirse en el primer chef latinoamericano en llegar al número 1 y colocar en esa posición también por primera vez a un restaurante localizado en Francia. Él y su equipo aceptaron el premio con una pancarta que combinaba las banderas de Argentina, Francia, Brasil e Italia.
“Hemos llegado aquí por el trabajo durante todos estos años y perseguir un sueño. Nunca hemos cambiado nuestra filosofía de trabajo”, aseguró a Efe el cocinero argentino, cuyo local quedó tercero el año pasado y está ubicado en el pueblo de Menton, en el interior de la costa azul francesa.
Colagreco, de 42 años, basa sus platos en las hortalizas y flores de su propio huerto y califica su cocina de “mediterránea con una mirada virgen”.
“Se trata de una cocina de no fronteras. No está ligada a una patria, está ligada al terruño”, apuntó tras la gala que por primera vez se celebró en Asia.
El Noma de René Redzepi, emblema de la alta cocina nórdica y que llegó a ser número 1 en cuatro ocasiones, reapareció en la lista y se colocó como número dos del mundo con su nueva versión tras un cierre temporal y el estreno de un nuevo local en Copenhague en 2018.
La dominante presencia española estuvo encabezada por Etxebarri, el asador ubicado en Vizcaya (norte de España), con el que el conocido como el genio de las brasas ha conseguido escalar siete posiciones hasta el tercer puesto.
El también vasco Mugaritz, de Andoni Luis Aduriz, situado en Guipúzcoa (norte) se colocó en séptima posición, por lo que lleva desde 2006 de manera ininterrumpida entre los diez primeros aunque nunca se ha alzado con la victoria.
En la cabeza de la clasificación también se situó en décima posición el peruano Maido de Lima, donde el chef Mitsuharu Tsumura fusiona cocina peruana y japonesa (nikkei).
El chef mexicano Enrique Olvera consiguió colocar su restaurante Pujol en el número 12, mientras que Cosme, cuya cocina mexicana innovadora ha conseguido conquistar Nueva York (EEUU) se posicionó en el número 23.
La corresponsable de este local, la mexicana Daniela Soto-Innes, fue además de unas de las protagonistas de la noche al recibir en el Marina Bay Sands de Singapur el premio a la Mejor Cocinera del mundo, un galardón que se había anunciado con anterioridad.
En un emocionado discurso, la chef de 28 años, confesó que creció en la cocina de su abuela en México y que desde siempre se propuso que la alegría que ella respiró allí tenía que estar presente en el restaurante en el que trabajara.
“Como mujer mexicana creo que con mi cocina puedo luchar contra la ignorancia y los prejuicios”, aseguró.
En la lista también se posicionaron este año Boragó (26) de Santiago de Chile, Don Julio (34) de Buenos Aires, A Casa do Porco (39) de Sao Paoulo (Brasil) y Leo (49) de Bogotá, con lo que la chef Leonor Espinosa consiguió que por primera vez se clasificara un restaurante de Colombia.
Los responsables de la famosa clasificación, elaborada por la revista británica Restaurant desde 2002, decidieron este año cambiar de manera bastante controvertida el reglamento y ningún restaurante que se haya coronado previamente como el mejor del mundo puede estar incluido entre los 50.
Una medida que busca hacer hueco a nuevos nombres, según los organizadores, que han creado la nueva categoría de “los mejores de los mejores” para agrupar a todos los números 1.
“Es bueno para los que hemos sido los primeros y para el resto. Así dejamos de hacer tapón los que estábamos arriba”, explicó hoy a Efe Joan Roca, quien junto a sus hermanos Josep y Jordi, está al frente de El Celler de Can Roca.
El restaurante catalán llevaba ocho años entre los tres primeros y se colocó como número 1 en 2013 y 2015, mientras que en la última edición se situó en segunda posición.
En la nueva categoría se incluyen locales emblemáticos como elBulli de Ferrán Adrià, que coronó la lista seis años o al italiano Osteria Franciscana, del cocinero Massimo Bottura, que fue número 1 en 2016 y en 2018.
Otras de las novedades de esta edición ha sido la apuesta por la paridad ya que por primera vez la mitad de los que votan- 1,040 cocineros, críticos y viajeros gourmets elegidos por la revista Restaurant- han sido mujeres.
Lanzada en 2002, la lista de los 50 mejores se ha convertido en un lugar prominente para rivalizar con el sistema de estrellas Michelín de larga data. La ceremonia en Singapur es la primera en celebrarse en Asia.
Por Ramón Abarca