Las vacaciones de verano son sinónimo de viaje y son millones los españoles que cogen un avión en busca de su destino idílico para estos meses. Dentro de los trámites a solucionar en todo lo que respecta a las horas y momentos anteriores al viaje está la facturación de las maletas, y es que pese a que la inmensa mayoría celebrarían poder viajar sin el lastre del equipaje, resulta algo necesario sobre todo en viajes largos o en los que involucran familias, donde normalmente hay que llevar más ropa u otros utensilios. Respecto a la facturación y las maletas te contamos un cambio brutal que vivirán los aeropuertos.
Si en tus planes está viajar, ya sea en el terreno de verano o en los meses posteriores, lo mejor y más recomendable es saber cómo se ordena el equipaje que se factura en los aviones. A través de un trabajador del Aeropuerto Internacional de Vancouver, ciudad de Canadá, y que también se ha destapado como influencer a través de la red social TikTok, se ha podido conocer el orden que utilizan las distintas compañías de aviones para ordenar las maletas y otros elementos que se facturan.
Los primeros equipajes en ser colocados serán los últimos que aparezcan en la famosa cinta de recogida en la que tanto tiempo tienen que esperar algunos tras el aterrizaje de su vuelo. Además, otros datos que se pueden comprobar según lo desvelado por este trabajador de aeropuerto canadiense, las primeras maletas que se introducen, al menos en este territorio, son las de los locales, aquellos viajeros cuyo destino es el del propio avión y no tienen embarque prioritario. Los viajeros que cuentan con escala estarían en segundo lugar, para cerrar con las maletas de los pasajeros con embarque prioritario y acabando por aquellos artilugios correspondientes al equipaje denominado como frágil.
El truco con las maletas en el aeropuerto
Como hemos indicado, el orden de salida de las maletas y el equipaje será contrario a cómo se había ordenado, por lo que lo primero que saldrá será el equipaje frágil, después el de los pasajeros con embarque prioritario, después las maletas de los viajeros con escala y, por último, los que tienen vuelo directo al destino y que no tienen embarque prioritario ni otro tipo de privilegio. El truco, por tanto, será, si se puede, que posicionen la maleta como frágil, o, si no facturar lo más tarde posible y ver si salta la sorpresa en la cinta de recogida del aeropuerto.
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