“No opino de eso para no meternos en la cosa partidista, solamente cuando hay alguna cosa grave”, dijo el presidente.
Para el presidente Andrés Manuel López Obrador, lo que sucede en Morena para renovar la dirigencia nacional es algo muy común en los partidos, y se negó a opinar sobre los señalamientos que se han hecho Mario Delgado y Porfirio Muñoz Ledo, ambos aspirantes a dirigir la institución política.
Ya que se pongan de acuerdo, expresó López Obrador en su conferencia matutina.
“No, eso no. No opino de eso para no meternos en la cosa partidista, solamente cuando hay alguna cosa grave”, dijo.
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El domingo, en una reunión con simpatizantes del partido en Coahuila, Delgado señaló que Muñoz Ledo fue dirigente del PRI, PRD, y que ahora está obsesionado con dirigir Morena como un capricho personal, para pasar al récord Guinness.
Sostuvo que con el anuncio de su autoproclamación, Muñoz Ledo busca dar una suerte de golpe de Estado al partido, ya que está atentando contra la ley y contra la democracia. E, incluso, dijo que con esas acciones, en cualquier momento desconocer a Andrés Manuel López Obrador o hasta atacarlo por su convicción democrática.
Por su parte, Muñoz Ledo anunció que tomará la presidencia de Morena este lunes a las 12:00 horas en la sede de dicho partido en la colonia Roma.
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El sábado, 41 diputados federales y 87 locales le pidieron a Mario Delgado aceptar la voluntad del pueblo y honrar su palabra de reconocer cualquier resultado, luego de que el Instituto Nacional Electoral (INE) diera a conocer el resultado de la segunda encuesta para la dirigencia de dicho partido.
El INE informó el viernes que Porfirio Muñoz Ledo obtuvo el 25.34% de las preferencias, mientras que Mario Delgado logró el 25.29%, por lo que la Comisión de Partidos y Prerrogativas Políticas del Instituto determinó un empate técnico.