Han pasado ocho meses desde que José Luis Gil sufriera un infarto cerebral que puso en jaque su vida. Un tiempo en el que los interrogantes se han cernido sobre él y en el que sus compañeros de reparto en La que se avecina se han convertido en sus portavoces. La última en dar la última hora sobre su estado de salud ha sido Loles León.
La actriz de Barcelona ha acudido al estreno de la película Padre no hay más que uno 3, dirigida y protagonizada por Santiago Segura. Ella participó en la segunda entrega y no quiso faltar a esta tercera. Un momento inmejorable para preguntarle por sus proyectos profesionales pero también por el intérprete aragonés. Loles presumió de figura a punto de cumplir los 72 años, demostrando que sabe cómo cuidarse para mantenerse joven por dentro y por fuera. Para el evento se enfundó un vestido rojo con escote vertical, sin mangas, con ligeros volantes en los hombros y unas sandalias con maxi tacón negras.
Loles León se muestra cauta al hablar de cómo se encuentra José Luis Gil, pero de sus palabras se deduce cierto optimismo: «Pues está mejor, pero vamos… poquito a poco, pero mejor», comenta. Su principal deseo es que «ojalá esté pronto ya recuperado». Y es que desde que se supo de su ictus, se ha llevado con bastante discreción su proceso de recuperación por deseo expreso de la familia.
Hace tan solo unas semanas fue otra compañera suya, Cristina Medina, quien arrojó algo de luz sobre José Luis Gil: «No te puedo decir detalles concretos. Sé que se está intentando recuperar del pelotazo que le ha tocado, que es muy gordo, y crucemos los dedos para que poco a poco vaya recuperando todas sus capacidades, pero es una cosa lenta».
Loles León, más allá de José Luis Gil
La intérprete acaba de empezar un verano que no tendrá vacaciones para ella. «Como siempre, dice». Tiene varios proyectos encima de la mesa. De su obra de teatro a las grabaciones de la nueva temporada de La que se avecina, pasando por un trabajo que todavía no puede desvelar. En la última remesa de episodios de la estrambótica comunidad de Montepinar, Loles seguirá siendo Menchu Morcillo, quien como el resto de propietarios, hará frente a un nuevo bloque de viviendas tras la expropiación de sus casas.
Loles León ha encontrado la horma de su zapato en las tablas. Bajo el título Una noche con ella, se puede degustar su retrato más personal llevado al teatro. Una hora y media de espectáculo en el que Loles, junto a dos jóvenes bailarines/actores y dos músicos en directo, desnuda su alma y da rienda suelta a su lengua mordaz. Lo hace cantando, bailando y con el fin de que el espectador recuerde esa noche con ella como algo inolvidable.