La NASA y la Universidad John Hopkins presentaron una nueva misión que podría tardar hasta 100 años en viajar más allá de nuestro sistema solar, donde nadie ha ido.
NASA y otros científicos presentaron una nueva misión interestelar que viajaría más lejos que cualquier misión y tardaría hasta 100 años en llegar a su destino. Aparte de la Voyager 1, la Voyager 2 y New Horizons, ninguna otra nave espacial ha abandonado el sistema solar. Pero estas tres naves espaciales fueron diseñadas para estudiar los planetas más distantes de nuestro sistema solar y no para explorar lo que hay más allá.
Pasando Neptuno, Plutón, los planetas enanos e incluso más allá del cinturón de Kuiper, encontramos la heliopausa, las regiones salientes de la heliosfera. La heliosfera está formada por viento solar y plasma solar. La heliosfera es una atmósfera solar protectora masiva que llega a los extremos de nuestro sistema.
La NASA y los científicos de la Universidad John Hopkins quieren viajar mucho más allá de la influencia del Sol. Dicen que su nave espacial es la más audaz, la más rápida y con el destino más lejano jamás ambicionado. Su destino es el espacio entre nosotros y las estrellas más cercanas. La misión podría tardar hasta 100 años. El equipo dice que la única forma de resolver los misterios de la heliosfera y comprender cómo protege los planetas habitables es mirándolo desde el exterior.
Heliosfera: vida aquí y vida más allá
La misión de la sonda interestelar se encuentra en etapas avanzadas de diseño. El equipo lanzó un plan complejo y detallado de 500 páginas. El plan incluye información sobre todo, desde el lanzamiento hasta los sobrevuelos y preguntas científicas para responder. Uno de los mayores desafíos es la duración del viaje. Los equipos que ahora trabajan en el proyecto no esperan vivir para ver los resultados. “Si te gusta la gratificación instantánea, no te involucres en la exploración espacial,“Ralph McNutt, de la Universidad Johns Hopkins, dijo a la prensa. El equipo pide que se desarrolle un plan continuo de gestión y equipo científico. Pero no es solo la edad humana lo que preocupa al equipo. Las Voyager 1 y 2 han tenido que cerrar la mayor parte de sus equipo debido al debilitamiento de sus baterías nucleares. Dada la distancia, la sonda interestelar no puede funcionar con energía solar. Pero la NASA está desarrollando baterías de energía nuclear de próxima generación.
El momento para explorar las capas externas del Sol no podría ser mejor. Después de 60 mil años, nuestro Sol, nuestro sistema solar y nuestra heliosfera están abandonando una región conocida como la Nube Interestelar Local. El sistema solar se está moviendo hacia un nuevo entorno. Los científicos creen que las heliosferas definen los sistemas solares y todo lo que contienen. Desde que el sistema solar comenzó a tomar forma hace 4.600 millones de años, nuestra heliosfera ha estado actuando como un escudo que nos protege mientras el sistema solar viaja a través de la galaxia. Comprender la heliosfera podría ser un gran avance para la ciencia y un paso más hacia otras estrellas. “Es hora, la sonda interestelar puede estar lista para su lanzamiento, escribimos la historia de las generaciones futuras y el camino hacia las estrellas nos espera., ” NASA y el equipo de la misión dice.
Fuente: Interstellar Probe, BBC