“No tienen respaldo de los ciudadanos, que no son de izquierda, son conservadores, que perjudican al movimiento legítimo, justo de los familiares de los jóvenes que quieren encontrar a los estudiantes desaparecidos”, manifestó el presidente.
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que los encapuchados que el jueves arrojaron cohetones y rompieron cristales de edificios, monumentos y bancos no son anarquistas, “esa es variante del conservadurismo, de tantas variantes que tiene”.
Desde Palacio Nacional, recinto que también fue vandalizado, el mandatario federal señaló que el anarquismo es un movimiento muy profundo en ideales, productivo, propositivo.
“¡Cómo van a ser anarquistas los que destruyen una librería! Eso no tiene que ver nada con el movimiento de izquierda, con el movimiento progresista. Eso se acerca más a otras cosas, al conservadurismo, que tiene varias manifestaciones y expresiones”.
Confió en que las autoridades de Ciudad de México harán las investigaciones correspondientes para poder actuar en consecuencia.
López Obrador también difirió de los que señalan que ante este tipo de actos se debe “usar la mano dura” y dijo: “yo lo que considero es que debe de hacerse valer la legalidad. Tiene que respetarse la ley, pero sin usar la fuerza porque por eso son provocadores”.
“Imagínense 100, 50 que nos tiene hablando aquí del tema, logran su propósito, pero si se reprimen, se les hace como se dice coloquialmente, ‘el caldo gordo’”.
Le envió un mensaje a los que “se portaron muy mal”, asegurándoles que “no tienen respaldo de los ciudadanos, que no son de izquierda, son conservadores, que perjudican al movimiento legítimo, justo de los familiares de los jóvenes que quieren encontrar a los estudiantes desaparecidos porque ni participan en la marcha van en paralelo destruyendo”.