Las rampas de acceso a Silicon Valley a menudo incluyen el acceso a un mentor inteligente, un capitalista de riesgo bien conectado o incluso un cohete espacial de una empresa nueva.
Pero una clase emergente de fundadores le está recordando al ecosistema cómo el colapso también puede ser un activador. El talento despedido está acudiendo en masa para crear nuevas empresas en todos los sectores, desde el clima hasta la criptografía y la economía del creador. Y esperan corregir el rumbo donde sus alma mater, tanto las grandes empresas tecnológicas como las pequeñas empresas emergentes, se equivocaron.
Los nuevos datos de Day One Ventures, una empresa de riesgo que respalda a los fundadores en etapa inicial, muestran cómo las plántulas están comenzando a florecer. La fundadora y médico de cabecera Masha Bucher, que dejó su vida anterior en Rusia como política y reportera de televisión para convertirse en capitalista de riesgo, creó un programa para ayudar a los posibles fundadores tras los recientes despidos de Stripe y Twitter.
Dijo que confía en que al menos entre el 0,1 % y el 1 % de los miles de empleados de tecnología que fueron despedidos este año podrían convertirse en fundadores increíbles.
Source link