El desayuno es la comida más importante del día por una razón muy sencilla: tu energía y tu salud a lo largo de la jornada van a depender en gran medida de lo que tomes. Despídete de la bollería industrial y apuesta por uno de estos zumos de frutas, que son perfectos para tomar en ayunas.
Los nutricionistas siempre recomiendan tomar la fruta entera porque así aporta más beneficios al organismo. Sin embargo, puedes tomarla en forma de zumo a primera hora de la mañana y luego tomar alguna pieza de fruta a lo largo del día.
¿Por qué es mejor tomar los zumos de frutas en ayunas, antes del desayuno? De esta manera te hidratas y obtienes la energía que necesitas para activarte a nivel físico y mental por el aporte de fructosa.
Manzana y zanahoria
La manzana y la zanahoria combinan de maravilla, y con ellas puedes hacerte un delicioso zumo natural. La manzana tiene un alto contenido en vitaminas B y C, y cuenta con propiedades antioxidantes. En cuanto a la zanahoria, es diurética al ser una fuente rica en agua, y ayuda a combatir el estreñimiento. ¿El resultado? Una bebida 100% natural, con un sabor delicioso y múltiples beneficios para la salud.
Piña y naranja
Si prefieres algo más tropical y exótico, puedes animarte con un zumo de piña y naranja. ¡Te ayudará a cargar pilas desde primera hora de la mañana! La piña es muy rica en agua, así que es perfecta para hidratar el organismo y eliminar la retención de líquidos. Por su parte, la naranja aporta mucha vitamina C, un nutriente esencial para fortalecer el organismo.
Limón y jengibre
El limón es una de las frutas más saludables que existen. Tiene propiedades diuréticas y purificadoras, y, además, es rico en antioxidantes. También es ideal para bajar de peso porque elimina las toxinas del cuerpo, aporta sensación de saciedad y estimula la quema de grasa. En cuanto al jengibre, es un antiinflamatorio natural y acelera el metabolismo.
Preparar estos zumos de frutas es muy sencillo. La manzana puedes cortarla sin pelar, pero el resto debes pelarlas. Luego, corta las frutas en pequeños trozos y añade a la licuadora. Licúa durante un par de minutos hasta obtener la textura deseada, ¡y listo! Recuerda que deben ser 100% naturales, así que no les añadas azúcares.
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