Para nosotros, los adultos hastiados, la tendencia a largo plazo de hacer que las aplicaciones y los juegos se descarguen gratis, pero llenarlos de opciones pagas es solo una molestia o quizás una progresión lógica del modelo de negocio. Pero los niños no han desarrollado nuestro cinismo y desconfianza ante la manipulación y, sin embargo, están siendo atacados. Varios senadores le han pedido a la FTC que investigue la desagradable práctica de monetizar las aplicaciones para niños.
“Escribimos sobre las prácticas de marketing manipuladoras de las aplicaciones diseñadas para niños”, escriben los senadores Ed Markey (D-MA), Tom Udall (D-NM) y Richard Blumenthal (D-CT) en su carta (PDF). “Los niños deben poder entretenerse y jugar sin ser bombardeados por mensajes promocionales, que los jóvenes tal vez no puedan evaluar e identificar con precisión como marketing”.
La carta llega a raíz de un estudio publicado el mes pasado que encontró que alrededor de 9 de cada 10 aplicaciones y juegos dirigidos a niños contenían publicidad. Educativo, gratuito, pagado, no importaba: los anuncios de una forma u otra estaban en todas partes.
Esto no debería sorprender a nadie exactamente; no es exactamente un problema nuevo. Por un lado, hemos escuchado sobre niños que compran monedas en el juego como cristales y Smurfberries durante años, con tanta frecuencia que los proveedores de la tienda de aplicaciones han tenido que tomar medidas serias en su contra.
Por otro lado, los niños de hoy (como los niños de ayer) ya están nadando en la publicidad y para algunos puede parecer extraño destacar un juego para teléfonos inteligentes cuando YouTube, la televisión tradicional y otras formas de medios están llenos de marketing centrado en el menor valioso. mercado.
Pero, por supuesto, solo porque lo hayamos encontrado antes no significa que lo hayamos resuelto. Y lo que dicen los senadores es que, especialmente en el caso de las aplicaciones para niños, estas prácticas a las que nos hemos acostumbrado de muchas maneras pueden calificar como “injustas y engañosas” según las definiciones de la FTC, y como tal, justifican una investigación:
El informe incluye evidencia de juegos para niños que disfrazan anuncios y hacen que los anuncios sean parte integral de los juegos en sí; juegos que utilizan personajes para obligar a los niños a realizar compras dentro de la aplicación; las aplicaciones para niños se comercializan como “gratuitas”, cuando esas aplicaciones realmente requieren un gasto adicional para poder jugar; y las aplicaciones para niños que se promocionan a sí mismas como educativas, cuando en realidad están saturadas de publicidad.
Cualquier acción por parte de la FTC, si optara por investigar esto, tomaría bastante tiempo en concretarse. Sin embargo, una carta pública como esta sin duda pretende ser una advertencia en sí misma para aquellos que emplean tácticas turbias. Quizás lo presten atención antes de que la FTC los obligue a hacerlo.
Source link