Generalmente, todos los restaurantes tienen carta dedicada a los vinos o podemos encontrar un apartado especial para estos dentro de la carta en la que aparecen todos los platos y bebidas. Sin embargo, puede darse la situación en la que dicha carta sea inexistente o que tal vez, estemos de vacaciones en otro lugar y la carta esté en otro idioma o puede que no conozcamos la referencia del vino que aparece descrito. ¿Qué hacer entonces? A través de los consejos de varios expertos os explicamos distintos trucos disponibles para elegir el vino cuando no hay carta de vinos.
Cómo elegir el vino cuando no hay carta de vinos
A partir de las pautas que a continuación oso vamos a señalar, vais a poder elegir un buen vino a pesar de que no tengáis carta o no seáis unos expertos al respecto.
Deja que el camarero te recomiende
Aunque vayamos a un restaurante muy humilde y no tenga carta de vinos, seguro que nos pueden asesorar sobre la oferta disponible. María José Huertas, sumiller de La Terraza del Casino en Madrid, explica que un buen profesional sabrá aconsejarnos «haya carta o no» e incluso averiguar cuanto queremos «gastar sin hablar de dinero».
En el caso de que nos recomienden algún vino en concreto será bueno confiar en la opinión experta, pero si todavía nos parece arriesgado, otra opción es pedir copas en lugar de la botella entera, de este modo si no nos gusta siempre podemos probar otro.
Guíate por lo que te apetece
Tener claro lo que deseas tomar será más que decisivo a la hora de elegir el vino haya carta o no. Un buen camarero conocerá los vinos del restaurante para el que trabaja, de modo que si le pedimos un vino que tenga cuerpo o uno que sea ligero o uno afrutado, sabrá qué vino debe traernos, pero eso sí, siempre guiado por lo que nosotros solicitemos.
Y en el caso de que no haya nadie que pueda traernos lo que solicitamos o que sencillamente, las opciones sean muy limitadas como suele ocurrir en la playa y en lo chiringuitos, los expertos recomiendan elegir un vino con poca crianza o directamente, sin crianza ya que además de ser más baratos son también más fáciles de saborear.
Fran Ramírez, ex-Alabaster y actual socio fundador de Amano Madrid y Amano Menorca asegura que «probar vinos locales» puede ser una buena opción cuando no hay carta de vinos.
Escoge algo conocido
Otra de las opciones disponibles es informar al camarero del vino que sueles beber o también de alguna bodega o denominación que te suene. Seguramente el camarero te traiga lo que pides y en el caso de no tenerlo te servirá algo similar.
Elige un vino local
En el caso de que estemos viajando, qué mejor oportunidad para probar vinos nuevos. Puede que no conozcas lo que ofrecen pero no digas «no» a un vino local sugerido que podría acabar siendo uno de tus favoritos.
David Robledo, sumiller del restaurante Ambivium en Peñafiel, Valladolid, nos propone así elegir siempre los vinos locales de la zona en la que estemos. Por ejemplo un vino mallorquín si estamos en Mallora o un albariño si estamos en Galicia.
Tener en cuenta la carta de comida para saber qué vino es mejor maridaje y fiarnos del camarero o quien nos vaya a servir el vino, así como ser completamente sinceros sobre lo que nos apetece tomar será también algo clave para elegir un buen vino aunque no tengamos, o no entendamos la carta de vinos.
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