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Los viajes de Pipper, el perro turista que se volvió “influencer”


Madrid.- El perro turista Pipper, convertido en ‘influencer’ en redes sociales por dar la vuelta a España junto a su dueño, Pablo Muñoz, protagoniza en su blog el proyecto “Pipper on Tour” para concienciar sobre la importancia de normalizar el turismo con mascotas.

Así lo cuenta a EFE Muñoz, periodista que hace casi cinco años decidió incorporar a Pipper a su familia y que, haciendo una pequeña parada en Madrid antes de su próximo viaje, decide darse un paseo por el parque del Retiro con su compañero de aventuras.

Desde que comenzaron su periplo en junio de 2018, Pipper ha recorrido cerca de 31,000 millas (unos 50,000 kilómetros) para visitar los 90 principales destinos turísticos de España.

Empezó en San Sebastián, su ciudad de origen, que Muñoz describe como “muy abierta” al cliente con mascota gracias a “la influencia del turismo francés”, en contraste con la mayoría del resto de territorios de España, donde los perros tienen difícil acceso al transporte público, a las cafeterías o a los museos.

Viajar con mascotas o dónde aceptan perros

A través de su blog, sus vídeos y sus publicaciones en redes, Pipper y Muñoz persiguen un triple objetivo: ayudar a las familias a viajar con perros; fomentar el civismo y la tenencia responsable; y demostrar no solo que las mascotas educadas pueden estar en lugares públicos sino también que lo ‘pet friendly’ se está convirtiendo en un nicho turístico.

“Creo que las instituciones y las asociaciones de empresarios tienen que ayudar al sector a darse cuenta del potencial que tiene el turismo con mascota, y además informarles. Muchas veces no es cuestión de invertir dinero, sino de informar a los dueños de bares, restaurantes y cafeterías”, explica a EFE el compañero de Pipper.

Según Muñoz, este “desconocimiento” provoca que “se perpetúen prejuicios” e “ideas falsas” y contribuye a que España se encuentre entre los “poquísimos países de la Unión Europea” que todavía restringen viajar en tren con perros.

Además de visitar museos y monumentos, Pipper y su amigo aprovechan sus viajes para reunirse con alcaldes, responsables políticos y asociaciones empresariales para debatir sobre qué se podría cambiar para atraer más turistas con mascotas.

Pero para Muñoz, tan importante como que el sector turístico se abra a los perros es que los dueños tengan “un comportamiento cívico ejemplar”, se hagan responsables y eduquen correctamente a sus mascotas.

De esa necesidad nacieron los cómics de “Pipper y la orden secreta” y “Pipper y el enigma de los perros desaparecidos” (editorial Alfaguara), los primeros de una serie que aspira a dar un “impulso” a la educación de las nuevas generaciones y a transmitir valores como la importancia de adoptar antes que comprar o la obligación de recoger los excrementos de la calle.

“Tener una mascota no es un capricho, es incorporar a un ser vivo a tu familia y que le vas a tener que cuidar durante toda su vida. Son maravillosos, pero también implican una responsabilidad”, concluye el compañero de Pipper, antes de emprender su próximo destino.




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