Mads Mikkelsen es, sin duda, uno de los actores europeos que más proyección ha tenido en cine internacional en los últimos años. Su última gran aparición ha sido aparecer en Indiana Jones y el dial del destino, interpretando al científico nazi Dr. Voller. El antagonista de esta quinta entrega de Lucasfilm aparece primero en una escena que se sitúa cronológicamente en 1940 y después de varias décadas después del final de la Segunda Guerra Mundial, podemos verle todavía aferrado al pasado, obsesionado con la derrota de Hitler. Un tipo de personaje perdedor con el que al intérprete se le ha identificado en los últimos años.
En una reciente entrevista con la revista GQ, el danés ha expresado ser muy consciente de que en su filmografía, poco a poco, se ha ido sintiendo más cómodo interpretando a personajes poco convencionales y siniestros: “Combinarlo, hacer algo real y también ser lindo, realmente no me parece interesante. Los perdedores son divertidos porque los conocemos. Es posible que tú mismo hayas estado en esa situación algunas veces”.
Mikkelsen es bastante consciente de que las grandes superproducciones le pueden ayudar a financiar o mejor dicho a tener después, la capacidad de elegir los proyectos más interesantes de Europa que quiera. Por eso lo hemos visto en los últimos años interpretando a algunos personajes en varias franquicias y al mismo tiempo, en grandes propuestas del viejo continente como Otra Ronda, la cual se llevó el Oscar a la Mejor Película Internacional el pasado 2021. “Si no hay nada más, definitivamente haré esto, porque es divertido. Y luego puedo hacer lo que quiera en Europa”, le explicaba al medio.
Unas declaraciones muy similares a las que ya dijo en IndieWire hace unos años, apuntando a que eventualmente le gustaría diversificarse e interpretar a más personajes que no sean villanos, pero aún disfruta de interpretar a los malos en franquicias icónicas.
El hombre franquicia
Desde prácticamente el comienzo de su carrera, Mikkelsen ha estado ligado al cine de autor europeo, trabajando con figuras de la talla de Nicolas Winding Refn o Anders Thomas Jensen. Sin embargo, en Hollywood es claramente Míster franquicias.
Primero fue el villano de James Bond, Le Chiffre, en Casino Royale. Más tarde aparecería en el Universo Cinematográfico de Marvel encarnando a otro antagonista, el hechicero Kaecilius en la película origen Doctor Strange. Dejará esa parte de “malo” en la precuela de Star Wars, Rogue One y finalmente, volvería a ser el enemigo en el mundo fantástico de Animales fantásticos, sustituyendo a Johnny Depp en el papel de Gellert Grindelwald. Ahora, su nazi de Indiana Jones y el Dial del destino agranda todavía más su etiqueta de “hombre franquicia”.
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