Hace un mes que María Pombo anunciaba, por fin, una buena noticia, después de haber pasado un confinamiento duro al conocer que padece esclerosis múltiple. Un enfermedad contra la que ya está luchando y que no le era desconocida, ya que su madre también está diagnosticada de lo mismo. Pero conocer que está esperando un bebé ha sido una noticia que ha dejado en un segundo plano esta terrible enfermedad, cuyo diagnóstico ha llegado a tiempo gracias a las sospechas de la propia influencer. Por eso este verano está siendo muy especial para ella, aunque sus planes no son diferentes a los del año pasado. María, su marido Pablo Castellano y su grupo de amigos están disfrutando de unos días de descanso en Ibiza donde la futura mamá está compartiendo estos primeros meses de embarazo con su gran amiga Natalia Coll, que también está embarazada.
Y es precisamente con ella, con quien María ya está haciendo planes para su pequeño. Un niño cuyo nacimiento está previsto para el próximo 7 de enero y al que llamarán Martín, como desvelaron el pasado viernes después de que, en una revisión, les confirmaran el sexo del bebé. Como buena mamá, la cántabra ya hace planes de futuro para su hijo, empezando por pensar en la pandilla de amigos que tendrá el niño. Y qué mejor que ser ‘colega’ de Bruno, el bebé que espera Natalia con Adrián González, futbolista del Málaga e hijo mayor del eterno 8 del Real Madrid, Míchel. Para ellos este será su tercer hijo, así que María tiene un gran apoyo en su amiga a la hora de resolver dudas y disfrutar de cada minuto del embarazo.
Pero además, tanto una como otra se están dejando mimar no solo por sus maridos, sino por el resto del grupo de amigos con los que disfrutan de las aguas de las pitiusas, que estén pendientes de ellas en todo momento, como dejan claro en sus redes sociales. María no puede ocultar su felicidad, su sonrisa es permanente y sus gestos premamá la delatan.
Si hace unas semanas sus seguidores la pedían que mostrara su barriguita, no ha sido hasta ahora cuando ya se le ha empezado a notar el embarazo. Y para los que aún no se dan cuenta, no se preocupen, la it girl no duda en tocarse la tripita con asiduidad. Un gesto que le va a acompañar en los próximos seis meses hasta que llegue ‘su cita a ciega perfecta’, como suelen definir algunas mamás el día del parto.