DALLAS, Texas – NBC 5 Investigates ha obtenido registros estatales que muestran que el costo del plan del gobernador de Texas Greg Abbott para transportar inmigrantes indocumentados desde la frontera hasta Washington D.C. ha costado más de $1,400 por pasajero hasta el momento.
Es un precio más alto que el costo de un boleto de avión en primera clase desde algunas ciudades fronterizas de Texas a la capital de la nación.
Los documentos, obtenidos a través de una solicitud de registros abiertos a la División de Manejo de Emergencias de Texas (TDEM), muestran que los costos de transporte superaron los $1.6 millones en abril y mayo, y la factura total puede ser mayor. Los registros sugieren que el estado aún no ha recibido las facturas de todos los gastos del viaje.
Los registros de pasajeros proporcionados por TDEM muestran que 1,154 pasajeros fueron transportados en los primeros meses del programa. Eso significa que el costo aproximado por pasajero ha sido de al menos $1,442.
COMPARACIÓN DE COSTOS
En una búsqueda en línea esta semana, NBC 5 Investigates encontró boletos de avión desde las ciudades fronterizas de McAllen y Del Rio, Texas, a Washington D.C. por alrededor de $200 a $300. Los boletos de primera clase estaban en el rango de $800 a $900, aún menos que el costo de un asiento en los autobuses fronterizos del gobernador republicano.
Nuestra búsqueda mostró que incluso un boleto de avión y una noche en un hotel de cinco estrellas cerca de la Casa Blanca podría costar aproximadamente la mitad del precio de los viajes en autobús financiados por el estado.
El segundo grupo de indocumentados arribó a la capital tras casi 30 horas de recorrido terrestre.
‘LLEVAR LA FRONTERA A BIDEN’
Abbott anunció el programa de autobuses en abril y lo describió como un esfuerzo por tomar lo que él llama el “desorden” del presidente Joe Biden en la frontera y dejarlo en la puerta de Washington.
“Los estamos enviando (inmigrantes indocumentados) al Capitolio de los Estados Unidos, donde el gobierno de Biden podrá abordar de manera más inmediata las necesidades de las personas que están permitiendo cruzar nuestra frontera”, dijo Abbott durante una conferencia de prensa el 6 de abril.
LOS ESFUERZOS DE RECAUDACIÓN DE FONDOS SE QUEDAN DETRÁS DEL GASTO
Pero los registros proporcionados por TDEM, que administra el programa de transporte en autobús, sugieren que en lugar de ”cargar” a Washington con inmigrantes, los autobuses pueden ”cargar” a los contribuyentes de Texas con grandes gastos de transporte que podrían proporcionarse a un costo mucho menor.
Abbott se comprometió a recaudar fondos privados para ayudar a compensar el costo de los viajes, pero el sitio web de su oficina muestra que solo se recaudaron alrededor de $112,000, mientras que los registros de TDEM muestran gastos que superan los $1.6 millones hasta el momento.
Mientras tanto, algunas organizaciones de ayuda en Washington D.C. argumentan que los autobuses no están agotando los recursos del gobierno federal, como esperaba Abbott. En cambio, dicen que la carga ha recaído en las organizaciones benéficas locales de D.C. que han dado un paso al frente para ayudar a los migrantes que se quedan en la acera cuando los autobuses fronterizos del gobernador llegan a la ciudad.
“Él podría hacerlo de una manera mucho mejor. Pero una vez más, siempre hemos sentido que se trata de un truco político de él tratando de hacer un punto político”, dijo Abel Núñez, director ejecutivo del Centro de Recursos para América Central en Washington, un grupo que se encuentra con muchos de los autobuses de Texas cuando llegan a la capital del país.
“VAN A SEGUIR”
Núñez dijo que más del 90% de los pasajeros con los que se encuentra su grupo no tienen la intención de quedarse en el área de Washington D.C.
“Se están mudando a otras partes del país”, dijo Núñez.
Otro grupo de ayuda, Caridades Católicas de la Arquidiócesis de Washington, compra boletos de avión y autobús para ayudar a muchos de los pasajeros de autobús de Texas a viajar a sus destinos finales.
“Teníamos un (pasajero) que iba a Houston, Texas. Ese era su destino final. Entonces, lo trajeron en autobús hasta aquí, y luego lo pusimos en un avión a Houston”, dijo la hermana Sharlet Wagner, de Caridades Católicas.
“Sería maravilloso si compraran solo un boleto (de avión) económico y los enviaran a donde quieren ir en lugar de ponerlos en un autobús a Washington, D.C.”, agregó Wagner.
LA OFICINA DE ABBOTT RESPONDE
En una declaración a NBC 5 Investigates, un portavoz de Abbott dijo que el gobernador había “recibido una gran cantidad de apoyo” para el programa, promocionando los fondos privados recaudados hasta el momento. La portavoz, Renae Eze, dijo que los autobuses están teniendo el efecto deseado de presionar a los federales.
“El gobierno de Biden ha respondido ralentizando sus esfuerzos de descarga de basura, brindando alivio sin querer a estas comunidades fronterizas abrumadas…”, dijo Eze.
Eze no respondió directamente a las preguntas de los investigadores de NBC 5 sobre si el programa podría administrarse de una manera más rentable.
Los registros proporcionados por TDEM muestran que el costo de los viajes en autobús se ha disparado en gran medida porque el estado contrata guardias de seguridad para viajar en cada autobús. Solo los gastos relacionados con la seguridad superaron el millón de dólares en las primeras semanas del programa, según los registros de TDEM. Los costos totales también aumentan por el hecho de que los autobuses generalmente viajan desde San Antonio hasta la frontera, luego a Washington D.C. y finalmente de regreso a Texas, viajando vacíos en el regreso. El estado recibe una factura por todo el kilometraje a lo largo del camino.
Algunos pasajeros que viajan en los autobuses dijeron que están agradecidos de que Texas esté gastando dinero para ayudarlos a moverse por el país.
“Una muy buena idea, una muy buena idea”, dijo una pasajera reciente que le dijo a NBC 5 que había huido de su país de origen, Colombia, y que estaba agradecida de que Texas la llevara a Washington, acercándola un paso más a su destino final, en Nueva Jersey
Mientras Uvalde sigue llorando a las víctimas, las críticas al plan de Abbott no se han hecho esperar.
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