Han sido meses de nervios e incertidumbre a partes iguales. Desde que, el pasado mes de septiembre, Tamara Falcó e Íñigo Onieva anunciaron su compromiso fallido, debido a que poco después de anunciar esta buena nueva comenzaron a circular unos vídeos en los que el empresario era infiel a la marquesa de Griñón, la pareja se ha convertido en una de las más mediáticas del papel cuché. Poco después de ese inesperado acontecimiento llegó el perdón por parte de la hija de Isabel Preysler en el ya bautizado como milagro navideño. Finalmente, hubo otra pedida que sí que ha terminado en boda.
Enlace que ha tenido lugar este sábado, 8 de julio en el palacio El Rincón, situado en Aldea del Fresno, a las afueras de Madrid. Aunque fueron pocos los detalles que trascendieron sobre la ceremonia debido al hermetismo que envolvió a la misma durante la jornada del festejo, conforme han ido pasando los días se ha ido desgranando con todo lujo de detalles cómo fue la ceremonia del ya matrimonio.
Tamara Falcó e Iñigo Onieva en su preboda en Madrid/ Gtres
Fue este lunes, 10 de julio, cuando se publicó el reportaje del enlace de la diseñadora y el empresario en la revista ¡Hola!, cabecera en la que Tamara Falcó habló sobre cómo se había sentido en todo este proceso. Aunque no es oro todo lo que reluce, porque el evento familiar estuvo marcado por una gran ausencia, la de su hermano, Enrique Iglesias. En la mencionada revista, la socialité respeta el motivo por el que su hermano, que vive en Miami, Estados Unidos, no cogió un vuelo para estar a su lado. Resulta que, el cantante prefiere evitar cualquier acto social, ya que padece agarofobia (miedo intenso a estar entre la multitud), aunque la marquesa le ofreció ir solo a la misa. No pudo ser.
La lista de invitados a la boda sufrió otra baja, también por parte de la novia. Jordi Cruz, juez en MasterChef, espacio en el que coincidió en 2019 con la aristócrata no asistió al evento. Llamó especial atención porque los otros dos jueces del talent culinarioen el que Tamara Falcó se proclamó ganadora, Samantha Vallejo-Nágera y Pepe Rodríguez, sí que quisieron ser testigos del esperado ‘sí, quiero’ entre la diseñadora y el empresario
Tamara Falcó y Jordi Cruz en ‘Masterchef Celebrity’ /Televisión Española
La química y la conexión entre Tamara y Jordi frente a las cámaras durante el rodaje del formato de cocina fue más que evidente. Crearon un vínculo cercano que terminó en un inesperado beso que se hizo viral. Sin embargo, lo suyo se quedó en una amistad que ha perdurado con el tiempo.
En el hilo de esta historia de dos entra un factor externo a la ecuación, Íñigo Onieva. A finales de marzo de este mismo año se estrenó la 11ª edición de MasterChef y el formato contó con algunos invitados especiales que ya habían pasado por el espacio como fue el caso de Tamara Falcó. La socialité se mostró de lo mas emocionada por regresar a los fogones y coincidir con los jueces del programa. Escena que ocurrió en el contexto de su reconciliación con Onieva. Sin embargo, se llevó un chasco por parte de Cruz: «No sé qué decirte, nunca me ha gustado».
El ¿enfado? de Isabel Preysler
Las mencionadas ausencias no han sido las únicas tensiones que han acaparado parte de la atención en lo que a la boda del año se refiere. Durante el discurso de Íñigo Onieva, en el marco de las celebraciones, el empresario volvió a pedir perdón a Tamara por sus infidelidades pasadas. Aunque eso no fue todo porque el relaciones públicas se dirigió, según han dejado ver los comensales, a ‘la reina de corazones’ como Isa, un exceso de confianza que parece que no terminó de encajar la madre de su mujer.
«Imaginad la cara que le debió poner, que Íñigo se puso de los nervios y le pidió perdón», ha desvelado Isabel Rábago en Ya es mediodía. Todo apunta a que una de las comidillas de la noche fue la frialdad entre yerno y suegra, ya que no fue el único momento incómodo, tal y como lo ha definido la periodista. En la misa, cuando Íñigo y su madre vieron entrar a Tamara se echaron a llorar lo que provocó que Isabel no entendiera su reacción: «Su cara era de ‘estáis haciendo el ridículo».
Isabel Preysler en la boda de Tamara Falcó e Iñigo Onieva / Gtres
El momento amigos
También se ha dado a conocer el momento de tensión vivido durante el convite, cuando uno de los amigos del novio, se levantó por sorpresa y comenzó a resaltar las virtudes del novio: «Mi amigos es maravilloso, no os creáis lo que habéis visto, mi amigo quiere mucho a Tamara», dijo uno de los ‘Curris’, perteneciente a la pandilla del empresario. Escena que sacó a relucir el programa Fiesta, de Telecinco. Sin duda, un momento de lo más incómodo para la novia, que bajó la mirada.