México aceptará ser intermediario si ambas partes lo solicitan, ya que no se puede actuar a petición de un solo banda, aclara AMLO. “Mi deseo es que no haya violencia”, agrega.
Por Juan Omar Fierro
México está dispuesto a ser la sede de las negociaciones entre la oposición venezolana que encabeza el autoproclamado presidente interino, Juan Guaidó, y el actual mandatario de ese país, Nicolás Maduro, siempre y cuando ambas partes lo soliciten, afirmó el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
En su conferencia matutina, López Obrador agregó que su gobierno está favor del diálogo y en contra del uso de la violencia para resolver la crisis política que sufre Venezuela, por lo que el papel de México en la actual coyuntura será la de un intermediario para encontrar salidas pacíficas a la crisis social y política que viven los venezolanos.
Reiteró que la política exterior mexicana solamente se puede conducir conforme a los principios de no intervención y respeto a los derechos humanos que marca el artículo 89 constitucional, por lo que México no puede actuar de forma oficiosa ni tampoco puede estar a favor o en contra de nadie en el marco de la crisis social y política venezolana.
Cuestionado sobre los brotes de violencia que ya se han registrado en Venezuela, pero sin que se le especificará que la mayoría de las víctimas son opositores a Maduro, López Obrador advirtió que pese a las críticas, su gobierno no va a violar ni transgredir los principios constitucionales en materia de política exterior.
El mandatario mexicano insistió en que la intermediación de México para hallar una salida al conflicto en Venezuela debe darse a petición de las dos partes y a que ambas estén de acuerdo con iniciar negociaciones, destacando que se requiere resolver la crisis de manera pacífica, evitando el uso de la fuerza y de la violencia para no caer en confrontaciones.
“Podemos ayudar al diálogo si nos lo piden las partes, no vamos a ser oficiosos, la solución se debe dar sin violencia, sin que se haga uso de la fuerza y sin descartar el respeto a la democracia, nosotros no debemos tomar partido si queremos buscar una solución pacífica a este conflicto”, aseveró.
En este marco, dijo que “la no violencia” será el estandarte de su gobierno para resolver conflictos y expresó su deseo de que los actores políticos venezolanos se pongan de acuerdo para encontrar una salida pacífica a este conflicto.
“Deseo de corazón que no haya violencia, que se entiendan sin confrontación, sin el uso de la fuerza, la verdadera política es para evitar la confrontación. La no violencia es nuestro estandarte”, concluyó.
El pasado 23 de enero, el Presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Juan Guaidó, se proclamó “presidente encargado” de ese país en un acto masivo que convocó a miles de sus compatriotas que rechazan la reelección de Maduro en unos comicios marcados por la violencia política, la persecución de los líderes opositores y la prohibición de partidos contrarios al régimen post-chavista.