La Secretaría de Economía llamó a Estados Unidos a retirar las extensas inspecciones al transporte de carga en su frontera con Texas y advirtió llevará el caso ante el comité de facilitación de comercio del tratado comercial de Norteamérica, conocido como TMEC.
En un comunicado, la dependencia detalló que las revisiones en esa frontera han causado demoras de ocho hasta 27 horas para que los vehículos mexicanos puedan ingresar al vecino país, así como millonarias pérdidas económicas.
“La imposición de estas inspecciones está generando pérdidas millonarias tanto para empresas mexicanas como para estadounidenses (…) afecta principalmente a productos perecederos”.
A principios de mayo, Texas comenzó a inspeccionar vehículos comerciales que cruzan a ese estado, desde México, en un puente que conecta la ciudad estadounidense Brownsville y la mexicana Matamoros.
El año pasado, el gobernador estadounidense, Greg Abbott, ordenó inspecciones similares que provocaron importantes interrupciones en la cadena de suministro, argumentando que eran necesarias para aumentar los esfuerzos en materia de seguridad.
Abbott, un republicano, ha criticado con frecuencia los esfuerzos del presidente demócrata de Estados Unidos, Joe Biden, para detener el tráfico de personas y el contrabando a través de la frontera entre Estados Unidos y México.
El gobierno afirma que estas acciones están motivadas por una “visión antimexicana que dista de la integración social, cultural y económica entre México y Texas. Basta mencionar que nuestro país es el principal socio comercial de dicho estado, y que esta relación representa al año en promedio 23 mil millones de dólares”.
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