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México cedió ante Estados Unidos y, al parecer, inició una guerra contra los migrantes: Académica UIA

Mariana Zaragoza advirtió que “no hay condiciones para que México se convierta en tercer país seguro” y añadió que, al aceptarlo, “viola el derecho internacional y el de los refugiados”.

El gobierno de Andrés Manuel López Obrador “terminó cediendo ante el de Estados Unidos” y parece que inició una guerra contra los migrantes, denunció Mariana Zaragoza, coordinadora del Programa de Asuntos Migratorios de la Universidad Iberoamericana (UIA).

En entrevista para Aristegui En Vivo, la académica consideró que ante la amenaza de la administración de Donald Trump de aplicar aranceles a los productos importados de México, “el discurso de derechos humanos y de protección a las personas migrantes que entran por la frontera sur, se acabó. Parece ser que hay una guerra contra los migrantes”.

Agregó que muestra de ello es el envió de 6 mil elementos de la Secretaría de Marina (Semar), la Guardia Nacional y la Policía Federal (PF) para “sellar” la frontera sur del país.

Otro elemento que demuestra que México cedió a las presiones estadounidenses es “la detención y deportación de población migrante centroamericana, en su mayoría con necesidad de protección internacional, familias con menores que huyen principalmente de Honduras, de una situación que es cada vez más insostenible en Centroamérica”, apuntó.

Mariana Zaragoza subrayó que hay mucha preocupación “pues esta postura del gobierno viola los derechos humanos, criminaliza a la población migrante y además está la detención de dos líderes migrantes (Irineo Mujica y Cristóbal Sánchez) el 5 de junio”.

Las redadas masivas de esta semana en la frontera sur y la detención de estos dos defensores son “la carta de presentación en las negociaciones ante Washington” para evitar la entrada de los aranceles, denunció.

La coordinadora del Programa de Asuntos Migratorios de la UIA denunció que “no hay condiciones para que México se convierta en tercer país seguro” y añadió que al aceptarlo, “viola el derecho internacional de los derechos humanos y de los refugiados”.

Concluyó que es cada vez más visible en la frontera sur la presencia de población centroamericana y africana que “tristemente” tiene que esperar, varada y sin condiciones, a que se resuelvan sus solicitudes de asilo.




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