Alfredo Figueroa, ex consejero del Instituto Federal Electoral y analista político, analizó este miércoles en ‘Aristegui en Vivo’, la compleja relación entre México y Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump, destacando cómo el mandatario estadounidense construye narrativas sin evidencia, ignorando datos y argumentos presentados por el gobierno mexicano.
Cuando el Estado mexicano ofrece datos, razones y estadísticas, Trump se voltea y dice: ‘tengo otros datos’.
Esta actitud, según el analista, refleja una dinámica en la que México, pese a las declaraciones de la presidenta Claudia Sheinbaum de “no someterse”, ha cedido ante las exigencias de EU, como la entrega de 29 criminales y el despliegue de 10,000 efectivos en la frontera.
Figueroa advirtió que México enfrenta un futuro de inestabilidad económica, con indicios de recesión y una alta carga fiscal heredada del gobierno anterior.
Este país ya está en un proceso de recesión, con un enorme endeudamiento y una carga fiscal insostenible.
Además, criticó que la estrategia para atraer inversiones, “nearshoring”, no funcionará en un país constantemente amenazado por la superpotencia estadounidense.
El analista también destacó que Estados Unidos, bajo Trump, se acerca más al autoritarismo populista de figuras como Vladimir Putin o Javier Milei que a una democracia liberal. “Estados Unidos está más cerca de Putin que de una postura europea”, dijo Figueroa, quien criticó que el gobierno mexicano actúe con un poder omnímodo, debilitando al Poder Judicial y reproduciendo prácticas autoritarias.
Respecto a las declaraciones de Sheinbaum, quien comparó su estrategia con la “serenidad de paciencia” del personaje ficticio Kalimán, Figueroa fue contundente: “ella no es Kalimán, es la jefa del Estado mexicano”. Subrayó que la presidenta enfrenta encrucijadas complejas, como definir los límites del sometimiento a las exigencias de Trump, quien busca un control absoluto sobre México.
Lo que pide Trump es sometimiento absoluto, y Sheinbaum debe decidir cuáles son los límites de ese sometimiento.
Figueroa cuestionó la falta de una postura firme por parte de México, señalando que el país ha entregado capos, desplegado fuerzas y cedido en múltiples frentes sin obtener nada a cambio.
Entregamos 29 capos, 10,000 efectivos y drones, pero no pusimos límites. Trump sigue exprimiendo el limón hasta el último agosto.
Además, criticó la incapacidad del gobierno mexicano para establecer una unidad nacional sólida, incluso dentro del propio Congreso, donde no se logra un acuerdo en un texto de ‘tres páginas’.
Finalmente, Figueroa sugirió que México debe tomar decisiones contundentes, como imponer aranceles a productos estadounidenses en estados clave como Texas y Nuevo México, donde hay intereses comerciales que podrían presionar a Trump.
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