Desde que el pasado mes de enero se publicaran las primeras imágenes de Iñaki Urdangarin paseando de la mano de Ainhoa Armentia en una playa cercana a Bidart, la vida de la Infanta Cristina y el que hasta entonces ha sido su marido ha dado un impactante e inesperado giro. Nadie pensaba que la pareja podría separarse, sobre todo después de la unión que habían demostrado a lo largo de los últimos años, en plena vorágine del escándalo por el caso Nóos. Un reportaje que dinamitó al matrimonio, cuando quedaba muy poco para que el exduque de Palma obtuviera la libertad condicional.
De la misma manera que ocurrió cuando Urdangarin resultó imputado, los hijos de la pareja han estado en el punto de mira, sobre todo Pablo, que durante un tiempo se erigió en una especie de portavoz familiar y conquistó a España con su exquisita educación y su templanza. También el mayor de todos, Juan, hizo algunas leves declaraciones a los medios, mientras que ni Irene ni Miguel se han pronunciado.
Pese a que la hija de los exduques siempre ha llamado la atención por su estilo y ser además la única que aún es menor -y, por tanto, está pendiente el tema de su custodia-, Miguel, siempre ha sido el más discreto, el que más al margen ha estado de la actualidad.
Hace algunas semanas, la revista Lecturas llevaba a su portada un reportaje en el que se veía a Iñaki con Miguel, durante un viaje del exduque de Palma a Ginebra. Una portada en la que se podía apreciar la buena relación del exdeportista y su hijo Miguel, al igual que mantiene con el resto -sobre todo con Pablo, ya que ha seguido sus pasos en el mundo del deporte-.
El más desconocido
Mientras que Juan vive en Madrid -pero es extremadamente discreto-, Pablo ha conquistado a los medios por su madurez y educación e Irene acapara atención por posibles comparaciones con la Princesa Leonor, el caso de Miguel es diferente. Rubio al igual que su hermana pequeña, Miguel cumple veinte años en un complicado momento familiar.
El joven prefiere estar alejado de los medios y está centrado en sus estudios de Ciencias del Mar en Reino Unido. Aunque no se conoce mucho de su vida o aficiones, sí se sabe que es un apasionado de la biología, del mar y que, además, le gustan mucho los deportes. También es un joven muy correcto y educado, aplicado y buen estudiante, a lo que hay que añadir que durante un tiempo estuvo dando clases de piano.
Discreto ante todo, a Miguel apenas se le ve en público. De hecho, una de sus últimas imágenes ha sido en el reciente viaje familiar a Abu Dabi, donde ha posado con el resto de la familia junto al Rey Juan Carlos. Una fotografía en la que queda claro el gran cambio de que ha experimentado el joven, tan alto como sus hermanos mayores, pero mucho más rubio. Antes de esto, se le había visto en el verano de 2019, cuando visitó a su abuelo tras someterse a un triple bypass en Madrid.
Ahora que cumple veinte años, su vida se encuentra en un punto de inflexión debido a la separación de sus padres, aunque es más que probable que su rutina no se vea afectada. Tampoco la de sus hermanos, ya que, menos Irene, todos llevan vidas completamente independientes. Hace dos años, Miguel se enfrentó a un importante cambio cuando perdió al escolta que tenía asignado, lo que le permite llevar una vida aún más discreta.
Ahijado del Rey Felipe, en estos momentos no se sabe cómo son exactamente las relaciones con Zarzuela, aunque es posible que poco a poco y si finalmente queda confirmado el divorcio de los exduques de Palma, la situación se destense para volver a una cierta normalidad.
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