Luego de que un grupo de militares encarcelados por el caso Ayotzinapa acusó al titular de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia (COVAJ), Alejandro Encinas, de haber fabricado pruebas para inculparlos, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez los señaló de buscar confundir con sus señalamientos, y hacerlo “con anuencia del mando”.
“La no verificación de partes de informe COVAJ no resta valor a pruebas de acusación sobre colusión entre narco y 27 Batallón”, afirmó la ONG a través de sus redes sociales.
La ONG afirmó que “el Ejército no es incorruptible”, y mostró mensajes de supuestos textos de miembros del grupo criminal, Guerreros Unidos, incluidos en el informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) como prueba de su colisión con militares.
La mañana del martes, los abogados de cuatro militares presos anunciaron que presentarán una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) por la presunta fabricación de pruebas en su contra.
También solicitaron la renuncia de Alejandro Encinas por presentar el informe de la Comisión para la Verdad y Acceso a la Justicia, al considerar que “contiene pruebas falsas”.
En conferencia, el abogado de los militares, César Omar González Hernández, calificó el informe como “falto de rigor, elaborado con evidencia cuestionable”.
En este sentido, negó la participación del general José Rodríguez Pérez; el capitán José Martínez Crespo; el subteniente Fabián Pirita Ochoa; y el sargento Eduardo Mota Esquivel en la desaparición de los 43 estudiantes normalistas.
Alejandro Robledo Carretero, otro de los abogados defensores, aseguró que los cuatro militares son chivos expiatorios, utilizados “para justificar sus casi cuatro años de investigación y la verdad parece más distante que nunca”.
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