El exprocurador General de la República, Jesús Murillo Karam, regresó al Reclusorio Norte luego de abandonar este miércoles la Torre Médica de Tepepan, donde recibía atención médica desde noviembre pasado.
La defensa Murillo Karam dijo que esta medida pone en riesgo la salud y vida del también exgobernador de Hidalgo.
En un comunicado firmado por el litigante José Javier López García señaló que la semana pasada Murillo Karam fue diagnosticado con Covid-19, lo cual, “lo deja en una posición aún más vulnerable” por las enfermedades que padece como son enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), hipertensión arterial sistémica e insuficiencia vascular cerebral.
“Incluso el día de hoy, presentó una presión arterial de 190/100”.
López García indicó que el pasado 6 de diciembre impugnaron la determinación del juez de control que rechazó el cambio de medida cautelar para que Murillo Karam siguiera el proceso en su casa.
Recordó que desde su ingreso al Reclusorio Norte, el exprocurador durante el sexenio de Enrique Peña Nieto fue trasladado en ocho ocasiones del centro penitenciario a diversos hospitales públicos.
“En la última ocasión, registrada el 19 de octubre, ya no regresó al reclusorio, sino que fue llevado a cuatro diferentes hospitales públicos: Hospital General de Xoco; el Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”, donde se le práctico de emergencia una cirugía Edarterecotomia Carotidea de Alto Riesgo; Hospital Belisario Domínguez y la Torre Médica de Tepepan”.
El pasado 13 de diciembre, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México informó que Murillo Karam continuaba en tratamiento médico en la Torre Médica del penal de Tepepan.
Afirmó que ante los rumores que apuntaban a un “fallecimiento”, la dependencia que es responsable de la seguridad y el manejo de los penales capitalinos aclaró que la salud de Murillo Karam se “mantiene estable”.
Jesús “N”, quien lleva un proceso en el Sistema Penitenciario de esta ciudad continúa su tratamiento en la Torre Médica del Centro de Reinserción Social Tepepan, ubicada en la alcaldía Tlalpan, donde se mantiene estable.
Fue el 2 de diciembre que el juez de control, Marco Antonio Fuerte Tapia, ratificó la prisión preventiva justificada que le impuso al extitular de la PGR para que enfrente las imputaciones por los delitos de tortura y desaparición forzada de personas que la Fiscalía General de la República (FGR) presentó en su contra.
La resolución del juzgador federal se dio a pesar de que la defensa de Murillo Karam argumentó que el exprocurador ha tenido que ir al hospital en cinco ocasiones desde que fue detenido en agosto.
Sin embargo, el juez de control se negó a autorizar la solicitud de prisión domiciliaria por considerar que persiste el riesgo de fuga de Murillo Karam.
Incluso, el juzgador federal sostuvo que el estado de salud del ex titular de la PGR “ha mejorado” tras sus visitas al hospital.
Desde su detención el 19 de agosto, a José Murillo Karam se le realizó una intervención quirúrgica para evitar una embolia, de acuerdo con un comunicado emitido por sus asesores jurídicos.
No obstante, el director del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, Santiago Aguirre, aseveró que la prisión preventiva justificada está relacionada con la riqueza inexplicable del exservidor público, de la cual se derivó el argumento de que hay riesgo de fuga para negarle el beneficio de llevar su proceso en libertad.
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