Nacho Vidal, reconocido actor porno español, se ha sentado con Jordi Évole para hablar de su vida personal y su antigua vida profesional. El actor de cine para adultos ha abordado diferentes temas relacionados con su privada y sobre cómo vivió ser uno de los actores porno de España y del mundo más conocido.
El actor porno, cuyo nombre real es Ignacio Jorda, ha confesado a Jordi Évole que “amaba mi trabajo”. El presentador contaba a Ignacio que es “nuestra Penélope Cruz del mundo de la pornografía“. Jorda, más conocido como Nacho Vidal, reconocía que “España es la cuarta potencia mundial en el mundo porno, solo por detrás de Estados Unidos, Hungría y República Checa”.
Nacho Vidal, en ‘Lo de Évole’
Nacho hizo muchísimo dinero “más de lo que me podía imaginar cuando trabajaba de portero o vendiendo pizzas”. Aunque reconocía que se lo reventó todo “a lo más grande con amigos, viajes, comidas, ropa y estrellando coches“. “Mirando hacia atrás pienso que si hubiera ahorrado un poco más podría vivir muy bien”, acababa confesando el actor porno.
Jordi Évole, en ‘Lo de Évole’
“Con 22 años empecé a pincharme testosterona para tener ese nivel muy elevado, por lo que yo estaba encendido, por lo que yo estaba cachondo todo el tiempo. En el Bagdad era algo natural, pero cuando me di cuenta que tenía que tirar de algo más. Me pinchaba yo mismo testosterona en el culo y la testosterona por las nubes”, confesaba el actor a Évole
Igancio Jorda detallaba a Évole que se pinchaba testosterona dos veces por semana para tenerla más alta, pero “el problema es que tu cuerpo deja de generarla cuando se la metes artificialmente, entonces tienes que estar metiéndotela todo el tiempo. Tienes un bajón y está todo muerto, y entras en un bucle de tomar testosterona hasta que aparecen las pastillas mágicas”.