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Ni amparos ni vacaciones frenan el Tren Maya: SEDATU suspende periodos vacacionales administrativos de la obra

Ni amparos ni vacaciones frenan el Tren Maya: SEDATU suspende periodos vacacionales administrativos de la obra

La Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU) canceló las vacaciones administrativas para dar paso al Tren Maya, a pesar de amparos.

Este martes se publicó en Diario Oficial de la Federación (DOF) el acuerdo que determina que no se suspenderán los actos, procedimientos administrativos y servicios de la SEDATU, que estén relacionados con el tren.

Con ello, se eliminan los periodos vacacionales para todas las actividades relativas al proyecto, incluyendo los días previamente considerados como inhábiles del 16 al 31 de julio 2022 y del 16 al 31 de diciembre de este año.

Tampoco “se suspenderá ningún trámite relacionado con cualquier expediente”, estipula el acuerdo. La SEDATU originalmente debe interrumpir la recepción de documentación y actosdurante el periodo vacacional, pero esto ya no aplicará.

El acuerdo, expedido por Román Guillermo Meyer Falcón, Secretario de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, sostiene que son “de utilidad pública la construcción de obras de infraestructura pública”.

Así, afirma que “con el fin de dar certeza y seguridad jurídica a todos los actos, procedimientos administrativos y servicios relacionados”con el Tren, “no se suspenderán plazos ni términos”.

Este nuevo acuerdo se publicó después de que el gobierno federal declarara que la obra tiene carácter de seguridad nacional y decidiera reiniciarlos trabajos de la obra en el Tramo 5, a pesar de los amparos otorgados.

En mayo, un juez federal suspendió de manera indefinida la construcción del tramo 5 que va de Playa del Carmen a Tulum por no contar con autorización de impacto ambiental antes de comenzar la obra.

Los juicios fueron promovidos por asociaciones ambientalistas que argumentan afectaciones a los ecosistemas y reclamaban que se emprendieron los trabajos sin una Manifestación de Impacto Ambiental.

Este lunes, Greenpeace denunció que se reanudaron las obras en el Tramo 5 del Tren Maya a pesar de estar suspendidas.

Según la organización, desde el pasado jueves 14 de julio han habido denuncias de que las obras continúan por lo que realizaron una manifestación en el sitio y exigieron que se detengan.

Igualmente, la asociación Sélvame del Tren informó que el gobierno federal reactivó los trabajos, “sin permisos y sin esperar la resolución de los jueces, violando de manera flagrante la ley y poniendo en riesgo a la Riviera maya, a su gente, su economía, su riqueza natural”.

Ante las denuncias, el director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Javier May, afirmó en entrevista con medios de comunicación que se reanudaron las actividades porque el proyecto fue catalogado en una sesión del Consejo como una obra de seguridad nacional.

Tras la noticia, Gustavo Alanís Ortega, director delCentro Mexicano de Derecho Ambiental(CEMDA), sostuvo durante entrevista en Aristegui en Vivo, que un decreto no puede ir por encima de una ley.

“Ningún oficio, ningún acuerdo, ningún decreto administrativo puede, legalmente hablando, dejar sin efectos amparos o suspensiones”, reiteró.

Señaló que el juez no ha resuelto sobre si las suspensiones se levantan por lo que siguen vigentes. Asimismo, aseguró que la ley de seguridad nacional no contempla la declaratorias, que el Consejo no tiene facultades para tomar dicha decisión y que las vías férreas no son obras de seguridad nacional.

Recalcó que, de violarse las suspensiones, se estaría en presencia de un delito y desacato, por lo que se haría de conocimiento al juez, quien a su vez daría aviso al Ministerio Público para que “haga lo que la ley determina al respecto”.

Aclaró que los cargos de desacato podrían recaer en quién empiece las obras.

Tras las críticas, el presidente Andrés Manuel López Obrador descartó durante la conferencia de prensa matutina que se incurra en desacato a los amparos que mantenían suspendida la obra.

Afirmó que los amparos fueron presentados por “un grupo de corruptos y pseudo ambientalistas” que buscaban anteponer sus intereses personales por encima del interés general.

El tramo 5 del Tren Maya va de Playa del Carmen a Tulum y está a cargo del Ejército mexicano, que subcontrató a tres empresas trasnacionales para realizar las obras: Mota Engil, Azvindi Ferroviario y Consorcio ICA.


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