Noomi Rapace parece estar dando un pequeño giro en su carrera. La actriz se dio a conocer al mundo gracias a su interpretación de la hacker Lisbeth Salander en la serie de películas que adaptaban la saga literaria Millennium. Después, Hollywood puso los ojos en ella para la secuela de Sherlock Holmes y para el papel de Elizabeth Shaw en las precuelas de Alien; Prometheus y Covenant. Continuó con pequeños papeles en la industria norteamericana, pero también en thrillers británicos. Su agente y ella misma tenían claro que el perfil de Rapace como actriz estaba muy ligado a la ciencia ficción, el terror y en general al suspense más oscuro. Así que Rapace volvió a sus orígenes, trabajando de nuevo más en Europa, con sensaciones como la cinta islandesa Lamb o ahora Black Crab, el último thriller sueco que estrenará en Netflix el próximo 18 de marzo.
Las nuevas imágenes de Black Crab muestran a Caroline Edh (Noomi Rapace), una patinadora de velocidad reconvertida en soldado, mientras ella y un compañero de comando luchan por sobrevivir en el archipiélago helado que su equipo táctico debe navegar para poner fin a la guerra que ha devastado el mundo. Una historia de supervivencia en el que los detalles de la misión que deben cumplir no están claros del todo y en el que crece la tensión en torno a la confianza del escuadrón militar. El objetivo es entregar un paquete, que llevaría al final de la guerra, así que toda la trama gira alrededor de ese misterioso macguffin. Además de Rapace, la cinta está protagonizada por Jacob Oftebro, Dar Salim, Ardalan Esmaili y Erik Enge.
Black Crab está basada en la novela homónima escrita por Jerker Virdborg y Adam Berg, el director, parece muy contento con el resultado de que ha conseguido con su equipo:
“Estoy muy feliz y orgulloso de tener un elenco tan fuerte que le de vida a esta película y a nuestros personajes (…). Nos harán sentir la brutalidad de la guerra, la importancia de la esperanza en un mundo sin esperanza y el duro precio que hay que pagar para sobrevivir”.
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