El piloto del helicóptero que se estrelló en la espesa niebla, matando a Kobe Bryant, su hija de 13 años, Gianna, y otros seis pasajeros, reportó que estaba subiendo cuando en realidad descendía hacia una colina, revelaron investigadores federales en documentos publicados el miércoles.
Ara Zobayan se comunicó con el tráfico aéreo que estaba subiendo a 4,000 pies para superar las nubes del 26 de enero cuando, en realidad, el helicóptero se estaba hundiendo hacia una colina donde se estrelló al noroeste de Los Ángeles, matando a las nueve personas a bordo.
El informe de la Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB) detalla que Zobayan pudo haber “percibido mal” los ángulos en los que estaba descendiendo, lo que puede suceder cuando un piloto se desorienta en poca visibilidad.
“Los ángulos aparentes calculados en este momento muestran que el piloto podría haber percibido erróneamente los ángulos…”, indicó un informe. “Durante el descenso final, el piloto, respondiendo a (control de tráfico aéreo), declaró que estaban “subiendo a cuatro mil”.
El reporte de más de 1,700 páginas de documentos de la continua investigación federal del accidente que fue publicada el miércoles no revela alguna conclusion ni un hallazgos sobre lo que causó la caída del avión que iba rumbo a la antigua Laker’s Mamba Sports Academy en Thousand Oaks para un juego de baloncesto juvenil.
Los funcionarios de NTSB enfatizaron que el “expediente público” no es reporte definitivo, “no contiene análisis, hallazgos, recomendaciones o causas del accidente”.
John Cox, un consultor de seguridad de la aviación, dijo que la ruta de vuelo errática del helicóptero (el avión se desaceleró, trepó, luego se inclinó hacia un lado mientras se hundía rápidamente) son signos reveladores de que un piloto se desorienta en condiciones que dificultan la visibilidad del terreno o el horizonte.
“No es la primera persona en experimentarlo”, dijo Cox quien explica que es una causa de muchos accidentes.
El NTSB dijo que no había signos de falla del motor en el Sikorsky S-76 y que el rotor estaba girando justo antes del choque.
Bryant, su hija, Gianna, y seis de sus amigos murieron a causa del accidente, junto con Zobayan.
Aproximadamente 45 minutos antes del despegue, Zobayan había enviado un mensaje de texto a un grupo de personas que supervisaban el vuelo diciendo que el clima estaba “bien”. Richard Webb, propietario de OC Helicopters, que reservó el vuelo, estuvo de acuerdo.
Zobayan despegó del aeropuerto John Wayne en el Condado de Orange a las 9:06 a.m. con los ocho pasajeros que había volado el día anterior al mismo destino.
Cuando el helicóptero no había aterrizado en una hora, un ejecutivo de la compañía que operaba el avión comenzó una búsqueda frenética en el software de rastreo y envió a otro helicóptero de la compañía para que lo buscara.
“Sin embargo, lo extraño es que el rastreador se había detenido a las 9:45 a.m., lo cual no es normal y estábamos tratando de comunicarnos con Ara por radio”, señaló Whitney Bagge, vicepresidenta de Island Express Helicopters. “Seguí refrescando el rastreador rezando porque estuviera roto”.
Los investigadores de NTSB entrevistaron a cuatro pilotos actuales y uno exempleado de Island Express y, aunque algunos elogiaron a la compañía, otros dijeron que la cultura de seguridad podría haber sido mejor, según los informes.
Un piloto dijo que Zobayan, el piloto principal de la compañía, no discutió la política de seguridad o la visibilidad mínima necesaria para volar en ciertas condiciones climáticas. Otro comentario dijo que la compañía no tenía un programa de gestión de seguridad real.
Sin embargo, la compañía dijo que no tenía problemas para cancelar vuelos si hacía mal tiempo. Citó seis vuelos que canceló para la estrella de Los Angeles Clippers Kawhi Leonard y uno para Kylie Jenner.
Island Express reportó 150 cancelaciones de vuelos debido al clima el año pasado. Hubo 13 cancelaciones debido al clima para 2020, todas registradas en los dos días previos al vuelo fatal de Bryant.
La tarde antes del vuelo, después de regresar a los Bryants y sus invitados al Condado de Orange, Zobayan le había enviado un mensaje de texto que acababa de verificar el clima para su próximo vuelo y que “mañana no era el mejor día, pero no tan mal como hoy”.
La salida del vuelo el sábado por la mañana se había retrasado por el clima por 15 minutos, según una entrevista de NTSB con Cate Brady, el asistente personal de Bryant.
Brady dijo que el horario original de vuelo para el domingo era a las 9:45 a.m., pero Bryant lo reprogramó para las 9 a.m. porque quería ver jugar a otro equipo antes del partido de su hija.
La viuda de Bryant, Vanessa, presentó una demanda en contra del piloto, Island Express y al dueño de la nave por negligencia. En la demanda, presentada en febrero mientras se conmemoraba a las víctimas durante un monumento público lleno de estrellas en el Staples Center, donde Bryant jugó la mayor parte de su carrera, Vanessa Bryant dijo que el piloto no debería haber volado en esas condiciones y debería haber abortado el vuelo.
El hermano de Zobayan respondió en una corte que Kobe Bryant conocía los riesgos de volar en helicóptero y que sus sobrevivientes no tienen derecho a daños por el Patrimonio del piloto. Island Express Helicopters Inc. ha negado la responsabilidad, categorizando el accidente como “un acto de Dios” y más allá de su control.
Las autopsias reveladas el mes pasado mostraron que Zobayan no tenía drogas ni alcohol en su sistema en el momento del accidente. Los informes del forense dicen que los nueve a bordo murieron por el impacto, no por el fuego que siguió.
Las otras víctimas del accidente en febrero incluían: el entrenador de béisbol de Orange Coast College, John Altobelli, su esposa, Keri, y su hija Alyssa; Christina Mauser, quien ayudó a Bryant a entrenar al equipo de baloncesto de su hija; y Sarah Chester y su hija Payton. Alyssa y Payton eran las compañeras de equipo de Gianna.