“El tamaño del problema en México es descomunal… desde que se inició la guerra contra el narco”, dijo el ex presidente del Comité contra las desapariciones forzadas de la ONU.
México vive una tragedia humanitaria que inició en el gobierno de Felipe Calderón y es en la que seguimos sumidos, señaló Santiago Corcuera, ex presidente del Comité contra las desapariciones forzadas de la ONU.
En entrevista para Aristegui en vivo, en la que celebró que la ONU ya pueda revisar casos individuales de desaparición forzada, dijo que esto abre una nueva ventana de justicia internacional para las víctimas.
Recordó que desde que México suscribió y ratificó la convención internacional para proteger a las personas contra las desapariciones forzadas, en 2007-2008, no se reconoció la competencia de dicho comité, pues al entonces presidente no le gustaba la intervención de organismos internacionales.
“El tamaño del problema en México es descomunal… desde que se inició la guerra contra el narco”, aseveró.
Recordó que Calderón dejó el país “con más de 120 mil muertes violentas en su sexenio y una lista que cobardemente ocultaron de más de 26 mil 500 personas desaparecidas en el país”.
De acuerdo con el último informe que ha presentado el presidente López Obrador, el nuevo registro de personas desaparecidas está por encima de las 70 mil, anotó.
Aunque hay un subregistro porque muchas personas no se atreven a denunciar, “hay siempre una cifra negra”, por lo que podrían ser más de 100 mil, lo cual “es espantoso”, comentó Corcuera.
Antes de acudir al comité de la ONU, aclaró, los denunciantes tienen que agotar las instancias en el país.
“Después de que la justicia mexicana no hace justicia entonces se puede presentar el caso ante el comité”, precisó.
Por último aseguró que si no hubiera sido por el impulso de madres de personas desaparecidas “esto no se hubiera logrado”, aunque también reconoció “la voluntad política del gobierno” para aceptar la competencia del Comité contra las desapariciones forzadas de la ONU.
