Paz Padilla está viviendo una de las etapas más complicadas de su vida. Apenas unas semanas después del fallecimiento de su marido, se acaba de conocer que ha fallecido su suegra. Según informa El Portal de Cádiz, Ana Isabel Agarrado, madre de Antonio Juan Vidal, moría este lunes, 10 de agosto.
La pérdida de Antonio Juan ha sido un tremendo varapalo tanto para Paz como para su hija Anna, ya que han vivido de manera muy privada la enfermedad que finalmente terminó con la vida del abogado andaluz. La propia presentadora ha compartido con sus seguidores cuál es su estado tras la marcha del que para ella ha sido y siempre será el amor de su vida. «Ahora estoy de retiro, atravesando el desierto más duro de mi vida, donde solo veo piedras en el camino. Él me ayudará a encontrar mi destino.
Soy un animal herido, pero avanzando».
Pero la muerte de la que fuera su suegra se une no solo a la de su marido sino también a la de su madre, conocida como Doña Lola, pilar fundamental de su vida. La señora murió a principios del mes de febrero después de permanecer ingresada en un conocido hospital de Cádiz.
«Ella disfrazaba la vida, las carencias las disimulaba y hacía que las pequeñas cosas fueran importantes para cada uno de sus hijos. No se como lo hacía, pero todos nos creíamos que éramos su preferido; nos inculcó el humor como forma de vida. Tu despedida ha sido triste a la vez que bonita. Ayer volviste a ser el centro de la fiesta, donde todos los que estuvieron se habrían reído contigo, como tantas veces lo hicieron.
Tus ganas de vivir y tu fuerza la mantuviste hasta tu ultimo soplo; y decías:
-Tiene guasa tener que irse!!!!
Cuando todos tus pollitos estuvieron a tu alrededor, emprendiste tu viaje para reunirte con “el viejo”.
Seguro arriba la estarás liándola con tu amiga Juana la Chata como en el banco del cerro Prim, donde atrapabais con vuestro sarcasmo y doble sentido a todos los que allí se atrevían a cruzar, sin poder dejar de reír.
Los cuchichines brindamos por Usía…
Vete tranquila porque tu esencia, como solías decir ,la llevamos en los “gemene”».
El 2020 no está siendo un año fácil para Paz, cuyo único consuelo es su hija, a la que está más unida que nunca y en quien ha encontrado el mejor apoyo para este año tan difícil.