Desde el inicio de la pandemia, las trabajadoras sexuales se han enfrentado a dos grandes problemas: la disminución de sus ingresos y el riesgo constante de contagio del coronavirus.
Para apoyarlas en este trance, la Brigada Callejera de Apoyo a la Mujer Elisa Martínez A.C. ofrece dos estrategias, el Coronasutra y un curso de enfermería.
El Coronasutra muestra gráficamente las medidas de prevención para no contagiarse de Covid-19, con posiciones que representan un menor riesgo porque no hay contacto de cara a cara.
Además. con actividades, cursos y consulta general, ginecológica o psicológica, la asociación apoya a las mujeres que se dedican al trabajo sexual.
Entre los cursos que ofrecen, está el de enfermería, que comenzó en noviembre. Cada viernes asisten al local, ubicado en la Merced, trabajadoras sexuales a tomar clases para poder obtener un certificado como Auxiliar de Enfermería, lo que para algunas representaría una oportunidad laboral.
Según la Brigada Callejera, el número de trabajadoras sexuales se ha duplicado, muchas se habían retirado del oficio y, por falta la de empleo y la crisis económica, regresaron a las calles.
Según su página, la Brigada busca erradicar las causas estructurales que generan el comercio sexual, para que quienes lo ejercen se valgan por sí mismas y superen sus obstáculos.
“Nacimos en un contexto de preocupación ante la no atención de un sector de mujeres que nadie escucha, nadie atiende y que muchos quisieran que no existieran, constituido por más de 800 mil mujeres en México, de las cuales la cuarta parte son menores de 18 años”, dice sobre e origen de la asociación.
Con fotos e información de Graciela López / Cuartoscuro
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