Ícono del sitio La Neta Neta

Oposición y Gobierno de Venezuela iniciarán diálogo en México este viernes 13 de agosto

Representantes del gobierno de Nicolás Maduro y la oposición se citaron este viernes 13 de agosto en la Ciudad de México, para iniciar un nuevo proceso de negociación y buscar una salida a la grave crisis en que se encuentra sumida Venezuela.

Este jueves, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México convocó a la prensa a la inauguración del proceso de negociación y diálogo de Venezuela, este viernes a las 16:30 horas. En un comunicado, señaló que el lugar será informado a primera hora del viernes.

También mencionó que a solicitud de las partes involucradas, se seguirán estrictos protocolos de seguridad y sanidad.

El miércoles, el canciller Marcelo Ebrard, anunció que el gobierno de Noruega confirmó que las partes que participarán en el diálogo habían entrado a la fase final de sus pláticas exploratorias “a fin de iniciar negociaciones” en México. Previamente, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Noruega había publicado un tuit al respecto.

El domingo pasado, el presidente Nicolás Maduro, señaló que el diálogo político entre su gobierno y la oposición encabezada por Juan Guaidó iba “bien” y que en ese momento ya se contaba con un documento redactado que estaba siendo debatido. “Hay siete títulos en la agenda y en los próximos días se anunciará la fecha y el lugar de las reuniones. Creo que en el diálogo político de paz con la oposición ‘guaidosista’ vamos bien”, dijo tras acudir a votar a las primarias del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).

En este diálogo participan el Gobierno de Venezuela y los partidos opositores Voluntad Popular, Primero Justicia, Acción Democrática y Un Nuevo Tiempo, así como la oposición en la que está al frente Guaidó. Maduro también reconoció al gobierno de México y al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ofreció el país como escenario para que se lleve a cabo este encuentro.

“Contamos con todo el apoyo de México para estos diálogos de paz con la oposición ‘guaidosista’, esperemos que se coloque la fecha y se indique el lugar exacto de este diálogo de paz”, comentó.

De acuerdo con la agencia Europa Press, los siete puntos del diálogo serán: garantías electorales; derechos políticos para todos; revisión de sanciones y activos; respeto al estado de derecho; convivencia política y social; protección de la economía nacional; y equipo de seguimiento y garantías.

Por parte gubernamental, Maduro anunció este jueves que encabezará la delegación Jorge Rodríguez, presidente de la Asamblea Nacional.

Como parte de la delegación, viajará también a México Nicolás Ernesto Maduro, hijo del mandatario venezolano, quien dijo que tanto él como el presidente de la asamblea acudirán “al diálogo con la oposición extremista gobernada desde Estados Unidos”, informó Venezolana de Televisión.

Respecto a su postura ante el inicio de las conversaciones, Maduro señaló que la disposición de su Gobierno es “hacer lo que corresponda para la felicidad y la paz de Venezuela”, pero, agregó que lo hará “sin doblegarse a las amenazas extranjeras”.

Juan Guaidó, al que algunos países como Estados Unidos consideran el presidente legítimo de Venezuela, señaló que el objetivo es “la búsqueda de una solución a la crisis”. Así lo aseguró este jueves, al término de una asamblea de ciudadanos en respaldo al Acuerdo de Salvación Nacional y por la libertad del diputado Freddy Guevara y todos los presos políticos en el país, celebrada por la tarde Caracas.

Igualmente confirmó que la delegación de la Plataforma Unitaria partirá a México este viernes. “Mañana (viernes 13) habrá mucha más precisión. Lo que puedo decir es que ayer (miércoles 11) Noruega confirmó a través de las redes sociales el inicio del proceso”.

Guaidó dijo: “La mayor y mejor Unidad posible es la herramienta para enfrentar a la dictadura. A los venezolanos les doy este mensaje: Hay Unidad para enfrentar los procesos que vienen en la negociación”.

Pero como ya ocurriera antes de las elecciones parlamentarias de diciembre pasado, en las últimas horas volvió a emerger una voz discordante en las filas de la oposición, la del excandidato presidencial Henrique Capriles. Al igual que entonces -aunque luego dio marcha atrás-, el exgobernador de Miranda se mostró partidario de participar en la cita con las urnas prevista para el 21 de noviembre, algo que hasta ahora ha descartado Guaidó.

“Yo al igual que millones de venezolanos creo que hay que votar el 21 de noviembre porque es nuestro derecho y no debemos renunciar a él”, defendió Capriles, reivindicando que las elecciones suponen una “oportunidad” para que los venezolanos se expresen y para que la oposición pueda articularse, organizarse y “recuperar fuerzas”.

“Hay que romper la inercia, salir del bache de la apatía y organizarnos”, conminó el también dirigente de Primero Justicia, incidiendo en que los comicios “no son el objetivo sino una parte importante de la ruta para el cambio que llevamos años buscando en nuestro país”.

Asimismo, Capriles dio su respaldo a la negociación prevista en México y anunció que la delegación de su partido estará encabezada por Tomas Guanipa. Este, hasta ahora representante del ‘gobierno’ de Guaidó en Colombia anunció horas después que renunciaba a dicho cargo para “realizar todo el esfuerzo necesario para que este proceso sea útil para la libertad de los venezolanos”.

“Hoy asumimos nuevos retos que van desde la negociación para lograr una salida a la crisis que hoy vive Venezuela así como impulsar la lucha por el derecho de los venezolanos a elegir”, agregó, en varios mensajes publicados en su cuenta de Twitter.

También confirmó su participación Stalin González, que fue vicepresidente de la Asamblea Nacional liderada por Guaidó. El integrante de Un Nuevo Tiempo (UNT) dijo que viajará a México “a luchar por espacios de democracia, para que los venezolanos podamos elegir nuestro destino”.

González reivindicó que Venezuela “requiere que trabajemos de forma coordinada y bien, con respeto y asumiendo todo de manera responsable”. “Evitemos la política de ‘hechos cumplidos’ o de estrategias superpuestas, por el bien de este proceso”, dijo.

En este sentido, también se mostró partidario de la participación de la oposición en las próximas elecciones regionales. Estos comicios, destacó, no son “una elección más sino una oportunidad para lograr la participación de todos los sectores, para organizarnos con y para la gente, para garantizar confianza en el voto como instrumento de lucha y para recuperar espacios”.

Aún no han confirmado quiénes serán sus representantes los otros dos partidos que integran el llamado G4 de la oposición venezolana, Voluntad Popular -la formación de Guaidó y de Leopoldo López- ni Acción Democrática.

Los antecedentes del diálogo

La oposición evita hacer concesiones dialécticas al Gobierno de Maduro, al que durante estos últimos años ha acusado en reiteradas ocasiones de pervertir el término ‘diálogo’. De hecho, Capriles optó el miércoles en su comparecencia pública por hablar de “proceso”, dejando claro que falta aún construir un mínimo de confianza entre las partes.

El primer intento de diálogo surgió en 2014 tras las masivas movilizaciones opositoras de febrero, que se saldaron con más de 40 fallecidos. El acercamiento se dio por roto en abril, con pocas movilizaciones en las calles y la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) evidenciando sus divisiones.

Oposición y Gobierno abrieron de nuevo la posibilidad de conversar en octubre de 2016. Se sentaron con una agenda más clara, al contrario de lo que había ocurrido en el primer proceso, pero la desconfianza llevó a que en enero de 2017 la MUD diera por roto el diálogo.

En septiembre de 2017, República Dominicana sirvió de escenario para un nuevo intento de acercamiento entre las partes, con una agenda para depurar responsabilidades por la violencia, atajar la crisis económica y ofrecer garantías de cara a citas electorales. La puerta volvió a cerrarse en febrero de 2018.

En el mes de enero de 2019, Guaidó se autoproclamó ‘presidente encargado’ y ese mismo año hubo una suerte de negociación en Barbados a instancias de Noruega, ya con la mayor parte de la comunidad internacional posicionada a favor o en contra de alguno de los dos bandos. También fracasó.

Desde entonces, tanto Guaidó como su entorno han dejado claro que no cabe hablar por hablar. “El diálogo no se descarta”, declaró en enero de este año a la agencia Europa Press, siempre y cuando no sea “un fin en sí mismo”.

(Con información de Europa Press y Aristegui Noticias)




Source link

Salir de la versión móvil