El papel del líder y portavoz del Parlamento es determinante e influyente para decidir si permite seguir adelante los planes y desafíos del gobierno, incluido el futuro del Brexit.
El Parlamento británico comenzó hoy un debate para elegir entre siete candidatos a un nuevo presidente, que remplazará a John Bercow y dará continuidad al proceso para salvar el Brexit, la salida de Reino Unido de la Unión Europea (EU).
El papel del líder y portavoz del Parlamento es determinante e influyente para decidir si permite seguir adelante los planes y desafíos del gobierno, incluido el futuro del Brexit, por los que durante sus discursos de este lunes ante los miembros de la Cámara de los Comunes (cámara baja) ha definido su postura al respecto.
Dado que el presidente ha influido tanto en los aciertos, como en los errores del Brexit, los parlamentarios buscan que el nuevo presidente asuma el papel de árbitro en la próxima etapa legislativa y el largo proceso del país para concretar la prolongada lucha del país respecto al Brexit.
Bercow se retiró la semana pasada después de una década como presidente del Parlamento, aunque su renuncia fue confirmada oficialmente el lunes con el inicio de los debates parlamentarios, los cuales se prevé concluyan esta misma tarde.
La primera en hablar fue la candidata Rosie Winterton, quien destacó que el trabajo del Presidente era “no dominar los procedimientos o hablar por el Parlamento”, por lo que prometió que de ser elegida sucesora de Bercow, buscará “apagar las llamas y no verterles gasolina”.
El laborista Chris Bryant dijo en su discurso que para él lo más importante es “un orador que respete las reglas, que sea completamente imparcial y que conozca el Erskine May (el libro de reglas parlamentarias)”. Se comprometió a resolver el problema del wifi en la Cámara, desatando aplausos.
El conservador Sir Edward Leigh dijo que un orador debería “sumergir a su personaje en el trabajo”, ser “una voz tranquila” y se pronunció a favor de la preservación de los edificios parlamentarios “en interés de nuestro administrador de pagos, los contribuyentes”, subrayó.
En su alocución, la actual vicepresidenta de los Comunes, Eleanor Laing, expresó su tristeza por la cantidad de parlamentarios que decidieron no presentarse nuevamente a las próximas elecciones de diciembre y prometió defender a cualquier miembro que sea seleccionado para el puesto.
“El Parlamento necesita ‘escapar’ de las estructuras jerárquicas que permiten que el bullying arraigue”, destacó Laing, tras condenar el tema del acoso y prometer que protegerá a todo el personal de la Cámara. “No los defraudaré”, afirmó, según un reporte de la cadena británica BBC.
Bercow fue duramente criticado por no hacer más para abordar las acusaciones de acoso y hostigamiento en la Cámara de los Comunes, además de ser acusado de maltratar a varios miembros del personal legislativo, aunque siempre lo negó.
La ex líder adjunta del Partido Laborista, Harriet Harman, fue la última en hacer su presentación ante los legisladores, prometiendo beneficios para las parlamentarias embarazadas y sus colegas varones cuando se conviertan en padres.
Los candidatos a la presidencia del Parlamento necesitan el apoyo de al menos 12 diputados, tres de los cuales tienen que ser de un partido diferente, para poder ser elegidos como nuevo líderes y voceros del legislativo británico. De no ser así, se debe votar de nuevo tras un receso de 10 minutos.
Si ningún candidato recibe más de la mitad de los votos, la persona que reciba la menor cantidad de votos se retirará, al igual que cualquiera que obtenga menos del 5 por ciento del total emitido. Para garantizar esto el proceso es supervisado por Ken Clarke, diputado de larga data en la Cámara de los Comunes. (Ntx)