A veces, necesitamos una dosis de experiencia para cuidarte el pelo en casa. Pensamos que lo hacemos bien y no es así, y por esto el cabello se ve más seco, sin vida, tosco y sin brillo. ¿Qué debemos hacer para que triunfe y mostrarlo más sedoso y bello?
El champú adecuado, los acondicionadores, desenredar el cabello en seco, lavarse bien el cabello… y muchos más trucos que te narramos a continuación.
¿Usas el champú adecuado?
Porque quizás no, y no lo sabes. Pues es el momento de cambiar y de tener presente que cada tipo de cabello requiere un champú distinto. Si lo tienes más bien frágil, pásate al enriquecido con quinina y vitamina C, o si lo tienes rizado, pues uno especial para este tipo de melenas.
Luego también puedes ir variando de champú y marca porque el cabello se acostumbra al mismo, así que ves renovando tus productos para el cabello.
Desenrédate el pelo en seco
Según L’Oreal, si nos desenredamos el pelo cuando está mojado, la fibra capilar está más frágil y las posibilidades de rotura aumentan considerablemente. Por esto, cepillar el pelo en seco favorece la microcirculación del cuero cabelludo y estimula la raíz.
Aconsejan empezar primero con las puntas (que es donde se concentran más los nudos), luego con los medios y termina con la raíz.
Un respiro al cabello
Los expertos también aconsejan que en días no festivos, hay que darle un descanso a la melena. “Evita peinarla, déjala respirar y llévala suelta. Si necesitas recoger tu pelo, utiliza gomas elásticas que no opriman ni rompan el cabello”, Roxana Almendros, CEO de Roxana Peluquería y Estética en Guadalajara.
Cambiar el champú según la estación del año
El frío en invierno, la lluvia, la calefacción, etc. no ayudan y por ello algunos profesionales del sector recomiendan cambiar de champú no sólo con la llegada de las bajas temperaturas: “El cambio de champú y acondicionador es muy importante dependiendo la época del año. Es un error utilizar siempre el mismo y de ahí que los tamaños de venta sean de 250 o 300ml. Lo adecuado es observar que necesita nuestro cabello en cada momento, si protección, volumen, nutrición, elasticidad, hidratación… “, explica Sonia Atanes, directora del salón de taninoplastia SAHB en el Paseo de la Castellana de Madrid.
Lávate el pelo con agua tibia
Ni muy caliente ni tampoco fría. Es un error que solemos hacer a la hora de cuidarte el pelo en casa. En invierno hace frío y siempre se nos ocurre poner el agua caliente, es de lógica, pero, al parecer, y según estima L’Oreal, debemos realizar todo el lavado con agua tibia (el agua muy caliente puede dañar el cabello) y, en el momento del aclarado, entonces recomiendan bajar la temperatura para cerrar las cutículas. Esto se traduce en fibra capilar más uniforme y lisa, pelo brillante y menos encrespado. ¡Toma buena nota!
A cada cabello, le toca su tratamiento
Si cada pelo debe lavarse con un champú distinto y adecuado a cada tipo de pelo, los expertos también recomiendan saber cuál es tu tipo de pelo y entonces aplicar el tratamiento que vaya mejor. Ya sea champú, más acondicionar, crema, serum, etc.
Mascarilla, acondicionador…
Si tu cabello está reseco, necesita una reparación. Es lógico pensar que el pelo necesita un buen corte, pero también un cuidado especial. De ahí que usemos mascarillas, acondicionadores, serums y otros productos que conseguirán que el cabello esté definido, y especialmente hidratado.
L’Oreal lanza un truco: dejar actuar estos productos todo el tiempo que te sea posible mientras cubrimos el pelo con un gorro de ducha o con una toalla de microfibra caliente para que el producto se active más con el calor.
Acondicionadores, sérums y aceites los puedes usar a diario, pero la mascarilla con 1 o 2 veces por semana será suficiente. Así que no te equivoques a la hora de cuidarte el pelo en casa.
No abuses de las herramientas de calor
Ya sabes que algunas fuentes de calor, tales como secadores, planchas o rizadores pueden ser contraproducentes para la salud de tu cabello. Así, Roxana Almendros, CEO de Roxana Peluquería y Estética en Guadalajara, recomienda limitar la cantidad de veces que usas tus herramientas de peinado con calor.
Alterna peinados que requieren de estas herramientas con otros que no las necesitan para dar descanso a tu melena.
Según Llongueras, si usamos el secador evitando incidir en el cuero cabelludo con el mismo, el cabello no se caerá. Ahora bien, si por el contrario, utilizas el secador para dar volumen o alisar un rizo que nace de la raíz, en estos casos, el secador se sitúa muy cerca del cuero cabelludo, por lo que esto sí que provoca que la raíz se debilite y, por tanto, el cabello tenderá a caerse.