Si hay algo que caracteriza a Paz Padilla es que no tiene pelos en la lengua. Cada vez que la presentadora ha querido dar una opinión así lo ha hecho, con total naturalidad. A través de su cuenta de Instagram, donde es bastante activa cada día, ha querido compartir el malestar que siente por un acontecimiento que le ha ocurrido recientemente. «Quiero comentaros una cosa porque me estáis preguntando que qué pasa con el chiringuito de mi hermano, qué pasa con El Trompeta. Quiero deciros que este año no está El Trompeta Beach ni va a estar porque ha salido hoy a quién se le ha otorgado la licencia del kiosco/bar», ha comenzado diciendo, dejando claro que la labor de su hermano no estaba en «servir comida o copas hasta las tantas ni actuaciones en directo».
Paz Padilla, visiblemente molesta / Redes sociales
Entrando en más detalles, la autora del Humor de mi vida ha cargado contra el Ayuntamiento de Barbate, en Cádiz: «El Ayuntamiento de Barbate da la licencia para la apertura del kiosco/bar y la da para tres años. Mi hermano lleva 11 años con esa licencia, es de Zahara de los Atunes, está empadronado aquí y tiene experiencia. Tiene guasa que montes un negocio, lo hagas crecer y después des la licencia a otro».
Pero lejos de dejar ahí su testimonio, Paz ha confesado que «esta mañana se han abierto las listas» y que ha sucedido algo absolutamente inesperado: «Se lo ha llevado uno, que no sabemos de dónde es, que ha apostado por el kiosco/bar de mi hermano la sorprendente cifra de 93 mil euros. ¿Tú me quieres decir a mí a cuánto tiene que vender la cerveza y los polos para pagar solo de alquiler 93 mil euros? ¿Qué está pasando, por qué el ayuntamiento permite eso? ¿De dónde viene ese dinero?», se ha preguntado, indicando que es prácticamente imposible alcanzar ingresos tan altos en ese negocio y en tan solo dos meses.
Aprovechando su popularidad en redes y su capacidad de llegar a la gente de una manera rápida y eficaz, la actriz ha querido hacer un llamamiento a todos los clientes habituales de El Trompeta, explicando que por desgracia, este año no será su hermano el que esté al frente del negocio, siendo así sustituido por una persona (desconocida por ahora) que llegará a los mandos con el objetivo de generar los beneficios necesarios para su mantenimiento. «Mi hermano sabe perfectamente lo que se gana con un kiosko de un mes o dos meses en la playa. Tú lo que no puedes es gastar más de lo que ganas, porque entonces estás trabajando para nada», proseguía, haciendo hincapié en la imposibilidad de ganar la cantidad citada lineas más arriba.
Sin duda, las palabras de Paz Padilla muestran una gran incredulidad ante lo sucedido con el kiosko en el que trabajaba su hermano durante la época estival del año. No obstante, sea como fuere, la presentadora no quiere desaprovechar sus meses de descanso y tras estallar con la organización pública, ha publicado un video en las playas de su Cádiz natal, iniciando así sus esperadas vacaciones.